PÁGINAS COMPLEMENTARIAS

viernes, 30 de enero de 2015

HACIA UN NUEVO HUMANISMO:
«31.- Solidaridad y bienestar personal»,

por José Antonio Hernández Guerrero


Si pretendemos evitar el paralizante desánimo que, a veces, nos generan la crítica y, sobre todo, la autocrítica, deberíamos evaluar, además de los fallos, los datos positivos que sugieren soluciones y hacen digeribles los malos tragos. Apoyándonos, por ejemplo, en la convicción de la dignidad y de la libertad del ser humano, y en nuestra capacidad para mejorar las situaciones y para seguir aprendiendo, sobre todo, de los errores, podemos alentar fundadas esperanzas y elaborar unos proyectos de progreso permanente que nos hagan crecer a cada uno de nosotros y que mejoren la convivencia solidaria en la sociedad a la que pertenecemos.


Reconociendo el declive que el individualismo contemporáneo ha introducido en las relaciones humanas, esta "ansiedad de mejora" nos permitirá compartir el sentido positivo de la vida, generar unos vínculos más estrechos entre los hombres, recuperar el diálogo con los diferentes y reconocer las inéditas peculiaridades del mundo que nos alberga.


Sólo persistiendo en los hábitos de un amor creativo y repitiendo los gestos supremos de [b]solidaridad[/b], será posible defender y nutrir el bienestar individual, familiar y social. Si realmente pretendemos que nuestras vidas no sean escenas sueltas -“hojas tenues, inciertas y livianas, arrastradas por el furioso y sin sentido viento del tiempo”-, hemos de buscar ese vínculo, ese hilo conductor, que las rehilvane y que proporcione unidad, armonía y sentido a nuestros deseos y a nuestros temores, a nuestras luchas y a nuestras derrotas.


José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente, sobre el sentido de la dignidad humana en «Hacia un nuevo humanismo».
30.- «Vivir el tiempo»,


lunes, 26 de enero de 2015

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
«ENSEÑANDO CON AUTORIDAD»
IV DOMINGO DEL T.O.
(01 de febrero de 2015) Ciclo “B”


VER: 

Las sociedades capitalistas
(reguladas en lucha de clases)
necesitan de la ideología:
los ciudadanos han de percibir
distorsionadamente la realidad social.
 

La ideología controla
la integración de los individuos
en el orden social,
mediante “cuentos” (educación)
y/o mediante
“cuentas” (economía)…
 



 

Dibujos de Cerezo

 

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “B”  (2014-2015)

«ENSEÑANDO CON AUTORIDAD» 

(01 de febrero de 2015) 

IV DOMINGO DEL T.O.

«La lucha anti-ideológica
no es cuestión solo de “doctrinas”,
sino de la actuación “increpadora”
del Evangelio hecho vida.
 
Nuestra lucha no es contra las personas,
sino contra el “demonio” del capitalismo.


----------------------------------------------------------------------------------
01 de febrero de 2015
4º domingo Tiempo ordinario (B)
 
Lectura del libro del Deuteronomio 18, 15-20
Suscitaré un profeta y pondré mis palabras en su boca.

Salmo 94, 1-2. 6-7. 8-9
Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor:
«No endurezcáis vuestro corazón.».


Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 7 32-35
La soltera se preocupa de los asuntos del Señor, consagrándose a ellos.

Lectura del santo evangelio según san Marcos 1,21-28
Enseñaba con autoridad.

Jesús, el Profeta que enseña con autoridad.
Moisés anunció de parte de Dios a su pueblo
la llegada de un profeta de su misma línea y categoría (1 lect.).

Jesús enseña con autoridad
y posee el poder de hacer milagros
porque es el Santo de Dios (Ev.).

Pablo aconseja estar libre para servirle
con corazón indiviso por amor al Reino (2 lect.).

---------------------------------------------------------------------------
02 de febrero de 2015
- La Presentación del Señor (B)



Fiesta de la Presentación del Señor,
llamada "Hypapante" por los griegos:
cuarenta días después de Navidad,
Jesús fue llevado al Templo por María y José,
y lo que pudo aparecer
como cumplimiento de la ley mosaica
se convirtió, en realidad,
en su encuentro con el pueblo creyente y gozoso.

Se manifestó, así, como luz
para alumbrar a las naciones
y gloria de su pueblo, Israel.
(elog. del Martirologio Romano).

Lectura de la profecía de Malaquías 3,1-4
Entrará en el santuario el Señor a quien vosotros buscáis.

Salmo 23, 7. 8. 9-10 (R.: 10bc)
Que la Iglesia abra de par en par sus puertas para recibir al que viene.

Lectura de la carta a los Hebreos 2,14-18
Tenía que parecerse en todo a sus hermanos.

Lectura del santo evangelio según san Lucas 2,22-40
Mis ojos han visto a tu Salvador.

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs


sábado, 24 de enero de 2015

PEPE VITINI, EN EL PRIMER ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO: EUCARISTÍA PARROQUIA DE SAN BENITO ABAD (PUERTO REAL). MIÉRCOLES 28 DE ENERO A LAS 7:30 DE LA TARDE, OFICIADA POR EL P. ANTONIO TROYA.


Queridos amigos/as: 

Recibid un saludo muy cordial. 

La Comunidad Arciprestal de Puerto Real, a través del Secretario del C.P.A., nos hace partícipe y nos invita a la Eucaristía que se celebrará (D.m.) con motivo del Primer Aniversario del fallecimiento del padre JOSÉ VITINI DÍEZ (Pepe Vitini), ocurrido el 28 de enero de 2014, en su ciudad natal de San Fernando (Cádiz), a los 68 años de edad y 38 de sacerdocio. 

La EUCARISTÍA oficiada por el Padre D. Antonio Troya Magallanes, se celebrará en la parroquia de san Benito Abad de Puerto Real (Barriada 512 viviendas). 

El día: 28 de enero de 2015 (miércoles). 

A las 7:30 horas de la tarde.
 

Foto de: Tele Puerto Real 
PEPE VITINI, estuvo en diversas parroquias del Arciprestazgo de Puerto Real, como la de San Sebastián, Rio San Pedro, el Buen Pastor, San Benito Abad, también estuvo en Medina Sidonia y en Algeciras.
 
Fue cura obrero en Astilleros de Puerto Real, hasta su jubilación.  Acompañó y promocionó la Pastoral Obrera en la diócesis y sus movimientos apostólicos de JOC y HOAC.

 
¡¡PEPE VITINI SIGUE SIENDO
MUY QUERIDOS POR TODOS!!

Os invita a que participe en la Eucaristía

LA COMUNIDAD ARCIPRESTAL,
AMIGOS Y COMPAÑEROS.



PEPE VITINI.
PRIMER ANIVERSARIO
DE SU FALLECIMIENTO

Por José Antonio Hernández Guerrero

A pesar de que ya ha transcurrido un año del fallecimiento de Pepe Vitini -uno de los escasos santos que he conocido y tratado-, me sigue resultando duro hablar de él en pasado. Créanme si les confieso que, en cuanto recuerdo su conducta ejemplar y algunas de sus frases, vuelvo a ver su noble figura y a escuchar sus palabras precisas, como si nuevamente estuviera paseándome con él en Puerto Real. En más de una ocasión me he sorprendido conversando con él sobre los episodios actuales y contrastando mis opiniones con las suyas, formuladas siempre con un tono controlado y evitando que sus juicios, por muy críticos que fueran, pudiera interpretarlos yo como tentaciones mesiánicas de salvar a la Humanidad o como una sutil murmuración. Me fijo en esos pequeños detalles que definen toda su personalidad, y me sigue llamando la atención su permanente preocupación por cuidar con esmero las palabras exactas que explican las actitudes y las conductas de Jesús de Nazaret.


Pepe Vitini sigue siendo uno de los sacerdotes cristianos a los que acudo en búsqueda de luz y de calor, porque, en vez de hablarme de Teología, él hacía una Teología viva, profunda y sencilla: cuando conversaba sobre cualquier asunto de actualidad, ahondaba en los sentidos más íntimos de los Evangelios, traspasaba la nebulosa de palabrería tecnicista tan apreciada por algunos de sus colegas. Me fijaba en la manera sencilla de plantear los problemas actuales de la sociedad y de la Iglesia y, sobre todo, en la formulación de unas soluciones en las que siempre empleaba el modelo de Jesús. En estas conversaciones periódicas que mantenía con este hombre sencillo, sobrio y pobre, adquiría consciencia de la cantidad de teorías que son inútiles para vivir una vida cristiana. Reconozco que es un lujo seguir conversando con este hombre bueno que, aunque no esté físicamente presente, sigue siendo capaz de transmitirme esos mensajes que me impulsan a vivir de una manera más auténtica. Ahora me doy cuenta de que estoy contando todo esto en presente como si Pepe no hubiese fallecido. Gracias Pepe.

José Antonio Hernández Guerrero

MISA DE DIFUNTOS POR PEPE VITINI.1er. Aniversario

Celebrada el 28 de enero de 2015

 

Homilia de Antonio Troya 

Introducción: Comunicando espiritualidad.  Ya hace un año que se nos fue Pepe.  Y esto nos lleva a considerar la estela que ha dejado en muchos su vida y su muerte.  ¿Qué duda cabe que en bastantes de sus amigos ha dejado una impronta difícilmente cuantificable, pero realmente perceptible?  Y esa impronta es una impronta de espiritualidad.  Porque muchos de ellos ni son muy espirituales ni siquiera viven una comunión visible con la Iglesia de la que él fue servidor.  Pero Pepe conjugaba una personal espiritualidad con un cariño cercano a todas las personas con las que se trataba.  Y es precisamente este cariño el que servía de vehículo conductor de su espiritualidad.  Y esa espiritualidad es un camino abierto hacia Dios, aunque no siempre culmine en una confesión de fe en Jesucristo que los mueva claramente a trabajar por el reinado de Dios en el mundo.  Naturalmente que muchos de sus amigos ya éramos creyentes y también hemos recibido el impacto de su entrega a Jesús a través de su elección de la condición de obrero; pero insisto en lo primero, porque pienso que retrata mejor su sentido de evangelizador de la clase obrera, aspecto poco cuidado por la Iglesia oficial.
  
1. La eficacia del Evangelio.  Porque entre los presbíteros que han optado por evangelizar a la clase obrera desde dentro de ella, hay muchos modelos, todos ellos sin duda válidos porque todos están basados en aquellas palabras de Pablo de Tarso: «Me he hecho débil con los débiles, para ganar a los débiles; me he hecho todo a todos, para ganar, como sea a algunos» (1Co 9,22).  Pero Pepe siempre se distinguió por querer mantener la pureza del Evangelio sin completarla con otros medios, ciertamente válidos, pero para él, superfluos.  A mí siempre me ha impresionado muchos esta actitud suya, porque leía en ella la seguridad que el Evangelio de Jesús tiene la fuerza suficiente para cambiar el mundo y que sólo con practicarlo y difundirlo la clase obrera recobraría su dignidad.  Esto sin querer de ningún modo desvalorizar otras opciones, ya que el Evangelio puede y debe valerse de los medios humanos a nuestro alcance para trasmitir su  mensaje.  Lo que sí quiero dejar claro es la fe de Pepe en la eficacia del  mismo Evangelio.
  
2. Su servicio en esta parroquia.  Y, como estamos recordándolo desde esta parroquia que fue su último destino, no quiero dejar de hacer memoria de su entrega a esta feligresía en un tiempo en que ya su enfermedad le hacía muy difícil realizar las tareas propias de un párroco y que en muchas ocasiones pudo llevar a cabo gracias a vuestra generosa ayuda.  Seguramente que su abnegación, más que otra cualquier acción pastoral ha influido en que ésta sea una parroquia viva y evangelizadora.  Conscientes de ello algunos de vosotros lo habéis acompañado después en su enfermedad con gran cariño.  Era un acto de agradecimiento y de amistad, un reconocimiento de que hay personas que marcan nuestra vida; y Pepe ha sido una de ellas.
 
Conclusión:  Una vida marcada con la cruz del Señor.  Pero también la vida de Pepe ha estado marcada por la cruz de Cristo.  Así tenía que ser porque él eligió unirse a Cristo para rescatar para la fe a la clase obrera.  Para la fe y para la dignidad humana, que le es debida como a personas y a miembros del cuerpo místico de Cristo.  A partir del desgraciado accidente sufrido en este pueblo su vida se ha ido agotando poco a poco hasta llegar a ser el varón de dolores que hemos contemplado en sus últimos tiempos.  Él unió sus dolores a los de Cristo al celebrar la Eucaristía, a veces con no poco dolor.  Recordando esas eucaristías nosotros queremos unirnos a él, que a través de ellas ha llegado a participar de la gloria eterna del gran Pastor de las almas, Jesucristo nuestro Señor.




Más información "pinchando" en el siguiente vínculo:



viernes, 23 de enero de 2015

HACIA UN NUEVO HUMANISMO:
«30.- Vivir el tiempo»,

por José Antonio Hernández Guerrero


En nuestra sociedad hipercompetitiva, el tiempo excesivamente repleto y la vida demasiado vacía son las consecuencias de ese excesivo afán lucro de unos pocos que amenaza gravemente el razonable deseo de bienestar de unos muchos. Este hecho tan generalizado debería despertar nuestras conciencias para que estemos vigilantes y para que luchemos por evitar que, expropiados de la vida -es decir, desprovistos de serenidad, de esperanza, de solidaridad y de amor,- las horas muertas o demasiado agitadas nos ahoguen en unos espacios saturados o en unos vacíos enfermizos. En mi opinión, para lograr que estos desvíos nos arrastren al agobio, a la desesperanza o a la tristeza, además de exigir derechos, deberíamos aprender a saborear con detenimiento cada uno de los instantes presentes y los que nos quedan por vivir en esta tierra.


Si leemos detenidamente los Evangelios y nos despojamos de los prejuicios pseudoteológicos, podemos llegar a la conclusión de que, frente a las religiones que sólo proponen la felicidad en un cielo futuro, Jesús nos invita a una salvación que empieza aquí y ahora, y que siembra un bienestar que dura para siempre. Por eso pienso que el creyente debería vivir el presente de una forma plena, asentándolo sobre los dos pilares firmes de un pasado analizado críticamente y de un futuro seriamente cimentado. El sentido temporal de la existencia humana exige que apoyemos nuestros diferentes momentos, por un lado, en la contemplación agradecida de los episodios saludables de nuestros antepasados y de nuestra propia biografía y, por el otro lado, en la elaboración de un panorama futuro que nos oriente y nos estimule hacia nuevos horizontes. El recuerdo nos hacer renacer sólo cuando nos genera unos propósitos transformadores. Si prescindimos de cualquiera de estos dos apoyos y nos quedamos sin memoria o sin proyectos, perderemos el equilibrio y el puente del presente se derrumbará irremisiblemente.


José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente, sobre el sentido de la dignidad humana en «Hacia un nuevo humanismo».
29.- «El tiempo»,


lunes, 19 de enero de 2015

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
«PESCADORES DE HOMBRES»
III DOMINGO DEL T.O.
(25 de enero de 2015) Ciclo “B”


VER:  

En los últimos días,
a raíz del luctuoso atentado
contra un semanario francés,
diversos gobiernos europeos
nos quieren adoctrinar sobre
la necesidad de recortar libertades
para aumentar la seguridad
contra el “enemigo terrorista”…
 



 


Dibujos de Cerezo

 

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “B”  (2014-2015)

«PESCADORES DE HOMBRES»
(25 de enero de 2015) 

III DOMINGO DEL T.O.
 

«Hemos sido llamados a ser
apóstoles del mundo obrero
para anunciarle
el evangelio del Reino.
 
Es Jesús mismo
quien nos llama.
 
¿Qué reticencias
le pondremos?».



----------------------------------------------------------------------------------
25 de enero de 2015
3º domingo Tiempo ordinario (B)


 

Lectura de la profecía de Jonás 3,1-5.10
Los ninivitas se convirtieron de su mala vida.

Salmo 24, 4-5ab. 6-7bc. 8-9 (W.: 4a)
Señor, enséñame tus caminos.

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 7, 29-31
La representación de este mundo se termina.

Lectura del santo evangelio según san Marcos 1, 14-20
Convertíos y creed en el Evangelio.

La cercanía del Reino de Dios pide la conversión.

La conversión vista en triple aspecto:

Conversión de la mala vida:
El profeta Jonás recorre la ciudad de Nínive
anunciando su destrucción por causa de sus pecados.
Los ninivitas reaccionaron, creyeron en Dios
y se convirtieron de su mala vida (1 lect.).

Convertíos porque está cerca el reino de Dios:
Jesús recorre los pueblos y caminos de Galilea
anunciando que se ha cumplido el plazo.
Predica la conversión y la fe en el Evangelio.
Llama a sus primeros colaboradores
que se convierten cambiando de vida (Ev.).

Conversión de actitudes:
Pablo advierte que la situación presente es apremiante
y que es necesario vivir como peregrino,
como el que está de paso (2 lect.).

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs


sábado, 17 de enero de 2015

HACIA UN NUEVO HUMANISMO:
«29.- El tiempo»,

por José Antonio Hernández Guerrero



Medimos mejor el tiempo cuando notamos que se aproxima el final de un trayecto. ¿Recuerdan con qué intensidad vivimos, por ejemplo, los minutos añadidos en un partido de fútbol o de baloncesto? A medida en que comprobamos que se acorta la longitud del hilo vital, lo ensanchamos y, cuando advertimos que sólo nos queda una copa, la paladeamos con mayor fruición. Por el contrario, hay que ver cómo desperdiciamos el tiempo cuando creemos que vamos a ser eternos, cuando desconocemos los bordes, cuando ignoramos dónde están las orillas del océano -ese vasto espejo del ser humano- que, ingenuamente, creíamos infinito. Y es que el éxito estriba, más que en poseer mucho, en administrar adecuadamente las pertenencias por muy exiguas que nos parezcan. Hemos de desarrollar la difícil habilidad de extraer todo el jugo a los episodios por muy insignificantes que, a primera vista, aparenten ser. Si sabemos que pronto se esfumarán, unas palabras amables, una sonrisa complaciente, un día de sol o una conversación distendida nos parecerán regalos inmerecidos.


La marcha imparable de la edad, el cercano aliento de la enfermedad o la proximidad siempre inmediata de la muerte nos inducen a deleitarnos con una simple bocanada de aire puro, con la lectura reposada de un libro interesante o con la escucha relajada de una melodía. El paso imparable del tiempo nos enseña a leer la vida con nuevos ojos y a comprobar cómo, simplemente, respirar con libertad puede ser un ansia suprema y un placer intenso. Lo malo es que, sin apenas advertirlo, despilfarramos el enorme caudal y dejamos que se fugue el misterioso regalo que nos proporcionan las heterogéneas experiencias cotidianas y los múltiples quehaceres habituales.


José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente, sobre el sentido de la dignidad humana en «Hacia un nuevo humanismo».
28.- «Un año nuevo»,


martes, 13 de enero de 2015

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
«PRIMEROS DISCÍPULOS» II DOMINGO DEL T.O.
(18 de enero de 2015) Ciclo “B”


VER: 

«Para Rajoy la crisis ya es historia del pasado.

Y se explicó: “La recuperación económica y social
ya se vive en los mostradores de los pequeños negocios
o en los pedidos a los proveedores,
en las barras de las cafeterías
o en las mesas de los restaurantes,
o en las nóminas de muchos españoles
y en el interior de los hogares”.

¿Qué entenderá este “hijo del 1%”
(=perteneciente a la élite)
por recuperación económica?…»
 





Dibujos de Cerezo

 

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “B”  (2014-2015)

«PRIMEROS DISCÍPULOS»

(18 de enero de 2015) 

II DOMINGO DEL T.O.
 

«Una vez ha venido Jesús,
los discípulos de Juan
ya no pueden
continuar esperando.
Tampoco nosotros podemos
seguir esperando
como si no conociésemos a Jesús
y sus propuestas de vida
y sus líneas de acción».

 


 


 



 

----------------------------------------------------------------------------------
18 de enero de 2015
2º domingo Tiempo Ordinario (B)




 

Lectura del primer libro de Samuel 3, 3b-10. 19
Habla, Señor, que tu siervo te escucha.

Salmo 39, 2 y 4ab. 7. 8~9. 10 (W.: 8a y 9a)
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 6. 13c-15a. 17-20
Vuestros cuerpos son miembros de Cristo.

Lectura del santo evangelio según san Juan 1, 35-42
Vieron dónde vivía y se quedaron con él.

Encuentro con el Señor.
Tres aspectos: llamada, encuentro y respuesta.
Una llamada: Dios llama a Samuel en el silencio de la noche (1 lect.).
Un encuentro: dos discípulos de Juan se encuentran con Jesús y hacen de intermediarios para que otros lo encuentren también (Ev.).
Una respuesta: Pablo recuerda que nuestros cuerpos son miembros de Cristo y templos del Espíritu Santo, y como tales nos hemos de comportar sin profanar el templo (2 lect.).


Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs


 

sábado, 10 de enero de 2015

NOTICIAS OBRERAS DE ENERO 2015:
«UN NECESARIO DIÁLOGO ECLESIAL»


Editorial de Noticias Obreras
Núm. 1.567 - ENERO 2015


«¿Cómo podemos vivir de forma
que se manifieste mejor
la comunidad de la Iglesia
y resulte más eficaz el apostolado?».







Ver:

● Publicaciones HOAC: http://www.hoac.es/publicaciones/

● Editoriales de Noticias Obreras:

● Números anteriores de Noticias Obreras:

● Números del Periódico ¡TÚ!:

● Acceso digital Solo para Suscriptores.





viernes, 9 de enero de 2015

HACIA UN NUEVO HUMANISMO:
«28.- Un año nuevo»,

por José Antonio Hernández Guerrero


Es posible que uno de los mayores beneficios que nos proporciona la celebración cíclica de un nuevo año tras el fin del anterior sea la de advertirnos machaconamente un hecho que, a pesar de su evidencia, nos pasa desapercibido a la mayoría de los mortales: que todos los tiempos que empiezan se acaban y que todas las realidades humanas tienen límites inaplazables.


Para valorar adecuadamente nuestras cosas, sobre todo, las más importantes, es necesario que, previamente, hayamos experimentado su carencia o que, al menos, tengamos conciencia de que, irremisiblemente, las vamos a perder. Paradójicamente, el conocimiento de los límites y de los finales proporciona unos alicientes halagüeños a los contenidos, y a nosotros nos estimula para que aprovechemos las múltiples oportunidades que la vida nos procura; nos anima para que disfrutemos de los momentos de bienestar que, aunque sean esencialmente efímeros, podemos lograr que sean intensos, confortables y profundos.


Todos tenemos experiencias múltiples de que saboreamos mejor las comidas cuando hemos sentido hambre y de que un vaso de agua fresca nos sabe a gloria bendita cuando, tras una larga caminata bajo el sol inclemente del mes de agosto, experimentamos una ardiente sed. Es lamentable, por ejemplo, que no comprendamos plenamente la importancia de una madre, de un amigo o de un compañero, hasta que -siempre demasiado tarde- calibramos las enormes dimensiones del irrellenable hueco que nos ha dejado.


José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente, sobre el sentido de la dignidad humana en «Hacia un nuevo humanismo».
27.- «El misterio humano»,