PÁGINAS COMPLEMENTARIAS

jueves, 5 de agosto de 2021

ORAR EN EL MUNDO OBRERO «19º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO» (08 DE AGOSTO DE 2021) CICLO “B”


19º Domingo TO • 8 agosto 2021

05 AGOSTO 2021 | POR 

Queridas hermanas y hermanos:

El que cree
tiene vida eterna,
dice el evangelio
de hoy.

Una vida que
se vive en Cristo,
y que nos lleva
al compromiso
amoroso por todos.

Comienzo
por dar gracias
por el don de la fe,
por los testigos que
me la transmitieron,
por la Iglesia con quien
la siento y vivo,
por quienes se me hacen
rostro de Cristo en
el compromiso amoroso.

Desde esta
acción de
gracias oro.

Un fuerte abrazo
en Cristo Obrero.

¡Hasta mañana en el altar!

Fernando Carlos Díaz Abajo
Consiliario General HOAC, y

Mª Ángeles Bayo Valderrama
Responsable de Organización
y Vida comunitaria.



San Juan 6,41-51:
«El pan que yo daré
es mi carne
por la vida
del mundo».

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«ORAR CON LA IGLESIA»
19ª Semana del Tiempo Ordinario (Ciclo ‘B’)
Del 08 al 14 de agosto de 2021.


Domingo 19º del Tiempo Ordinario
Santo Domingo de Guzmán, presbítero
08 de agosto de 2021.

El profeta Elías, con la fuerza del alimento que le proporcionó el ángel del Señor —pan y agua—, caminó hasta el monte de Dios (1 lect.).  Se nos anuncia aquí la eucaristía, nuestro alimento para el camino de la vida.  En el Ev., Jesús se manifiesta como el pan bajado del cielo: no es solo ya la fe en Él lo que nos da la vida eterna, sino el participar en su sacrificio, comulgando, lo que nos salva (cf. orac. después de la comunión).  Desde ahí tenemos que vivir en el amor, que fue lo que llevó a Cristo a entregarse por nosotros como oblación y víctima de suave olor (2 lect.).

- 1 Re 19,4-8. Con la fuerza de aquella comida, caminó hasta el monte de Dios.

- Sal 33. R/. Gustad y ved qué bueno es el Señor.

- Ef 4,30-5,2. Vivid en el amor como Cristo.

Del Evangelio de san Juan 6,41-51.
“Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo”

Los judíos decían: -“¿No es éste Jesús, el hijo de José?  ¿No conocemos a su padre y a su madre?  ¿Cómo dice ahora que ha bajado del cielo?”.  Jesús tomó la palabra y les dijo: -“No critiquéis.  Nadie puede venir a Mí, si no lo atrae el Padre que me ha enviado.  Y yo lo resucitaré el último día.  Os lo aseguro: El que cree tiene vida eterna.  Yo soy el pan de la vida para que el hombre coma de él y no muera.  Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre.  Y el pan que Yo daré es mi carne para la vida del mundo.

COMENTARIO

Si miramos solamente a Jesús como “el carpintero de Nazaret” y no aceptamos a Jesús como “el Hijo de Dios”, no es posible comprende su mensaje ni comprometerse con Él.  Es lo que sucedió a sus paisanos a quienes Jesús les decía que era el pan de vida.  Para aceptar a Jesús hay que abrir de par en par las puertas de la fe.  Tenemos que dejarnos llevar por Dios, a través de su palabra, de los acontecimientos, de la oración.  Bajo la luz de la fe veremos con claridad que Jesús es el pan de vida bajado del cielo.  Así tenemos a nuestro alcance la fuerza para recorrer el camino de Dios.

ORACIÓN

Señor creo que eres el pan del cielo que alimentas la fe, el amor, la comprensión la lucha por la justicia.  Creo que alimentas nuestros compromisos de convivencia, de libertad, de respeto, de solidaridad.  Creo que eres el pan de la vida, la fuerza de la resurrección, la vida nueva del mundo.  Pero quiero creer con más fuerza Señor, por eso te pido conocerte más, crecer en la fe, alimentar mi vida con tu carne, con tu entrega.  Creo Señor que eres el pan vivo bajado del cielo.


Lunes de la 19ª Semana T. Ordinario
Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein),
virgen y mártir, patrona de Europa,
09 de agosto de 2021.

Fiesta de santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith) Stein, virgen de la Orden de Carmelitas Descalzas y mártir, la cual, nacida y educada en la religión judía, después de haber enseñado filosofía durante algunos años entre grandes dificultades, recibió por el bautismo la nueva vida en Cristo, prosiguiéndola bajo el velo de las vírgenes consagradas hasta que, en tiempo de un régimen hostil a la dignidad del hombre y de la fe, fue encarcelada lejos de su patria, y en el campo de exterminio de Auschwitz, cercano a Cracovia, en Polonia, murió en la cámara de gas el año 1942 (elog. del Martirologio Romano).

Del Evangelio de san Mateo 25,1-13.
“¡Que llega el esposo, salid a su encuentro!”

Dijo Jesús: -"Se parecerá el reino de los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo.  A medianoche se oyó una voz: ¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!’.  Las necias viendo que se les acababa el aceite fueron a la tienda.  Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta.  Más tarde llegaron también las otras doncellas, diciendo: Señor, señor, ábrenos’.  Pero él respondió: Os lo aseguro: No os conozco’.  Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora".

COMENTARIO

El Dios que Jesús nos presenta es: Un Dios alegre, que prepara un banquete de boda para recibirnos, y que quiere nuestra felicidad.  Su Reino se describe, con una de las celebraciones más alegres y festivas.  No poder participar en ella significaba perderse algo muy importante.  El relato es una llamada de atención a no perder la oportunidad de participar en la gran fiesta del Reino.  “Estar preparado” significa escuchar y poner en práctica las palabras de Jesús, que pueden resumirse en el mandamiento del amor.  El retraso de la venida de Jesús no puede llevar al adormecimiento y al descuido, ni puede hacer que los cristianos se desentiendan de sus compromisos.  La vigilancia ha de ser continua.  Hay cosas que no pueden improvisarse a última hora.  Cada uno ha de estar preparado.  Mi espera, mi vigilancia, mi estilo de vida no puedo delegarlo.  Es una opción personal: Cada uno tiene que poner el aceite en su lámpara.  Así ocurrió con Teresa Benedicta (Edith Stein), convertida del judaísmo al cristianismo, entregó su vida al Señor como Carmelita.  Murió en el campo de concentración, de Auschwitz.

ORACIÓN

Gracias Padre por este tiempo que vivimos tan “rico en posibilidades de salvación”.  Gracias porque me preparas una gran fiesta para recibirme en tu Reino y colmar mis posibilidades de vida y plenitud.  No dejes que pierda esta posibilidad única, ni dejes que me duerma en mi bienestar y comodidad.  Ayúdame a estar en vela para que me reconozcas en el día de tu venida salvadora.  Gracias porque me preparas una gran fiesta para recibirme en tu Reino.


Martes de la 19ª Semana T. Ordinario
San Lorenzo, diácono y mártir
10 de agosto de 2021.

Fiesta de san Lorenzo, diácono y mártir, que fervientemente deseoso, como cuenta san León Magno, de compartir la suerte del papa Sixto II en su martirio, al recibir del tirano la orden de entregar los tesoros de la Iglesia, él, festivamente, le presentó a los pobres en cuyo sustento y abrigo había gastado abundante dinero.  Tres días más tarde (año 258), por la fe de Cristo venció el suplicio del fuego, y el instrumento de su martirio se convirtió en distintivo de su triunfo.  Su cuerpo fue enterrado en Roma, en el cementerio de Campo Verano, conocido desde entonces por su nombre (elog. del Martirologio Romano).

Del Evangelio de san Juan 12,24-26.
“A quien me sirva, el Padre lo amará

Dijo Jesús a sus discípulos: -“Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto.  El que se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna.  El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo premiará”.

COMENTARIO

Jesús es claro.  No se puede engendrar vida sin dar la propia.  No se puede hacer vivir a los demás si uno no está dispuesto a "des-vivirse" por los otros.  La vida es fruto del amor, y brota en la medida en que nos entregamos.  En la metáfora de Jesús, el caer en tierra y morir es condición para que el grano libere toda la energía que tiene.  El fruto comienza en el mismo grano que muere.  Así sucede también en la vida.  El don total de sí es lo que hace que la vida de una persona sea realmente fecunda.  El cristiano acepta el dolor, y hasta la muerte, sólo como precio y consecuencia de su compromiso con la vida.  San Lorenzo, diácono de la Iglesia de Roma, murió abrasado sobre una parrilla, después de haber manifestado que la verdadera riqueza de la Iglesia son los pobres.

ORACIÓN

Señor Jesús, amigo que nunca falla, quiero amar con amor gratuito a todos: Al de afuera y al de dentro.  Quiero amar con tu amor, que es servicio y entrega total; quiero no sólo dar limosnas, sino darme como se da la madre: Sin medida, sin calcular la entrega, todo entero.  Quiero que mi mano sea saludo y perdón, quiero sembrar estrellas de alegría y de paz.  Deseo hacer de mi vida un servicio a los demás.  Porque en tu entrega señor Jesús sé que la entrega es camino para la vida eterna.  Señor Jesús, quiero caminar en tu amistad y tu amor.


Miércoles de la 19ª Semana T. Ordinario
Santa Clara, virgen.
11 de agosto de 2021.

Del Evangelio de san Mateo 18,15-20.
Si te hace caso, has salvado a tu hermano

Dijo Jesús a sus discípulos: -“Si tu hermano peca, repréndelo a solas entre los dos.  Si no te hace caso, díselo a la comunidad, y si no hace caso ni siquiera a la comunidad, considéralo como un pagano o un publicano.  Os aseguro que todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo.  Si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre del cielo.  Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.

COMENTARIO

El pecado es una realidad siempre presente en la comunidad cristiana porque la Iglesia es una asamblea de hombres y mujeres que, en medio de limitaciones y flaquezas humanas, caminan juntos como hermanos hacia Dios.  Por eso es necesaria la corrección fraterna como medio de conversión.  La corrección fraterna tiene como objetivo la recuperación del hermano, su raíz es el amor fraterno, que es el alma de la convivencia eclesial.  Jesús afirma también su presencia en medio de los que oran, se congregan en su nombre, viven la corrección fraterna.

ORACIÓN

Señor Jesús: Queremos ser personas nuevas, constructores de un mundo mejor, donde reinen la verdad, la justicia y el amor, donde se venza el mal con el bien, donde reine el cumplimiento de tu voluntad.  Rompe la dureza de nuestro corazón para que aceptemos las correcciones de los hermanos, para que no amemos a medias.  Queremos reunirnos en tu nombre Señor Jesús, orar en tu nombre, y según tu palabra encontrarte vivo en medio de la comunidad.  Que así sea.


Jueves de la 19ª Semana T. Ordinario
Santa Juana Francisca de Chantal, religiosa.
12 de agosto de 2021.

Del Evangelio de san Mateo 18,21-19,1.
“No te digo que perdones hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete”

Se adelantó Pedro y preguntó a Jesús: -"Señor, si mi hermano me ofende, ¿cuántas veces le tengo que perdonar?  ¿Hasta siete veces?".  Jesús le contesta: -"No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete".

COMENTARIO

El perdón evangélico no ha de estar sometido a tarifas ni a medidas.  Dios nos perdona sin medir el número de veces que lo hace.  Por tanto, la única medida válida para perdonar a los demás es la que utiliza el Señor con cada uno de nosotros.  Dios perdona: Sin poner medidas ni condiciones; sin esperar recompensa alguna; sin pedir razones ni esperar explicaciones.  El principio básico del perdón está puesto por Jesús.  Quien ha experimentado la misericordia de Dios por un perdón total y reiterado, no puede estar calculando las fronteras del perdón y de la acogida que ha de ofrecer al hermano.

ORACIÓN

Aquí me tienes Señor, después de la centésima caída.  Agradeciendo tu amor infinito, tu misericordia.  Vengo a pedirte perdón, por las mil veces que reduje el amor, por ignorar, indolente, lo bueno de mis hermanos, perdón, Señor, por mis caprichos personales, que impuse a los demás, perdón por la rebeldía interior.  Hazme paciente, puro, caritativo, piadoso; dame hambre de tu Palabra, deseos de conocerte mejor.  Concédeme perdonar, como Tú me has perdonado.  Dame valor para ser testigo tuyo ante los demás.


Viernes de la 19ª Semana T. Ordinario
San Ponciano, papa, y san Hipólito,
presbítero, mártires.
13 de agosto de 2021.


Del Evangelio de san Mateo 19,3-12.
Por lo tercos que sois os permitió Moisés divorciaros de vuestras mujeres;
pero, al principio, no era así

Se acercaron a Jesús unos fariseos y le preguntaron, para ponerlo a prueba: -"¿Es lícito a uno despedir a su mujer por cualquier motivo?".  Él les respondió: -"¿No habéis leído que el Creador, en el principio, los creó hombre y mujer, y dijo: ‘Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne’?  De modo que ya no son dos, sino una sola carne.  Pues lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre".

COMENTARIO

Jesús expone hoy a sus interlocutores un tema harto difícil: La permanente unidad del matrimonio y, por tanto, su indisolubilidad.  En tiempos de Jesús, el matrimonio era una unión por conveniencia o por acuerdo de familias.  Por tanto, si la conveniencia o el acuerdo no resultaban "rentables", podía romperse.  Jesús, afirma una doctrina distinta acudiendo a la raíz del matrimonio que brota de la voluntad de Dios.  No importa lo que permitiera Moisés dada la terquedad de los miembros del pueblo, ni lo que ahora está practicando ese mismo pueblo.  Lo importante es lo que Dios instituyó.  Y el matrimonio fue instituido como una alianza o compromiso de por vida entre dos personas, sin más condiciones que la de entregarse mutuamente de modo absoluto.

ORACIÓN

Oh Dios, de quien procede toda paternidad en el cielo y en la tierra, haz que cada familia humana sobre la tierra se convierta, en verdadero santuario de la vida y del amor.  Haz que tu gracia guíe los pensamientos y las obras de los esposos hacia el bien de sus familias y de todas las familias del mundo.  Haz que las jóvenes generaciones encuentren en la familia un fuerte apoyo para su humanidad y su crecimiento en la verdad y en el amor.  Haz que el amor, corroborado por la gracia del sacramento del matrimonio, se demuestre más fuerte que cualquier debilidad y cualquier crisis, por las que a veces pasan nuestras familias.  Amén.  Señor, que cada familia humana sobre la tierra se convierta, en verdadero santuario de la vida y del amor.


Sábado de la 19ª Semana T. Ordinario
San Maximiliano María Kolbe, presbítero y mártir.
14 de agosto de 2021.

Del Evangelio de san Mateo 19,13-15.
“No impidáis a los niños acercarse a mí; de los que son como ellos es el Reino de los cielos”

En aquel tiempo le presentaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y rezara por ellos, pero los discípulos les regañaban.  Jesús dijo: -"Dejadlos, no impidáis a los niños acercarse a mí; de los que son como ellos es el Reino de los cielos".  Les impuso las manos y se marchó de allí.

COMENTARIO

También a nosotros nos falta sencillez.  Nuestra vida de adultos es sofisticada y compleja, muchas veces insincera, desgarrada por solicitudes que matan la felicidad.  Los niños dan ejemplo de un vivir en intensidad el momento presente sin estériles añoranzas del pasado ni angustiosas preocupaciones por el futuro.  Bástale a cada día su malicia, es decir, sus propios problemas.  Vivir el momento presente tiene sus inequívocas ventajas y puede tener inconvenientes: Todo debe ser valorado en referencia al Reino de los cielos.

ORACIÓN

Padre quiero ponerme en tus manos con la sencillez de un niño, con la confianza de un niño en brazos de su madre.  Quiero acercarme a ti Señor con la sencillez de un niño y decirte: Te quiero.  También con labios y corazón de niño quiero pedirte para que no haya más guerras, para que todos te conozcan y te quieran, para que todos tengan pan.  Quisiera recibir de ti Señor lo que reciben los niños de sus padres: Un beso, una sonrisa y como un niño cobijarme en tu regazo.  Quisiera recibir de ti Señor lo que reciben los niños de sus padres: Un beso, una sonrisa y como un niño cobijarme en tu regazo.


Iglesia y Mundo Obrero – 75 años de encuentro