PÁGINAS COMPLEMENTARIAS

domingo, 31 de julio de 2016

«42.- LA LUZ DEL SEMBLANTE»
(Claves del bienestar humano),
por José Antonio Hernández Guerrero




La luz del semblante



Aunque es cierto que, en la actualidad, el negocio dedicado a los cuidados corporales está obteniendo en España un notable auge, no podemos olvidar que el afán por mejorar el aspecto físico para gustar a los demás y, sobre todo, para gustarse a sí mismo, es un hecho permanente desde el comienzo de la civilización humana.


La Historia nos muestra cómo, en todos los tiempos y en todos los lugares, los hombres y las mujeres han buscado fórmulas para resaltar sus encantos y para disimular sus defectos. Recordemos, por ejemplo, cómo la reina de Egipto, Cleopatra, se aplicaba abundantes cosméticos elaborados con cenizas, con tierras y con tintes. Y, corriendo el tiempo, los hombres del siglo XVIII usaban cuidadas pelucas para cubrir la calvicie producida por los productos que se empleaban para matar a los piojos.


En la actualidad, es variadísima la cantidad de artículos cosméticos y de productos dietéticos que prometen paliar las marcas del paso del tiempo como, por ejemplo, las cápsulas de vinagre de manzana para rebajar kilos, los geles reafirmantes de pechos, las cremas para eliminar arrugas, los tónicos faciales, las pomadas para endurecer los glúteos, los ungüentos para fortalecer los músculos o los potingues para evitar la piel naranja.


Pero, según la publicidad, el procedimiento más eficaz -y, también, el más caro y el más peligroso- es la cirugía estética: una especialidad de la cirugía plástica, dedicada a restaurar la forma y la función de las estructuras del cuerpo humano. Progresivamente va aumentando el número de hombres y de mujeres que, influidos por los anuncios espectaculares, acuden a los quirófanos para que les acorten la nariz, les reduzcan las orejas, les eliminen la papada, les supriman los “michelines”, les estiren los pómulos, les disimulen las ojeras o, en resumen, les proporcionen una careta de plástico.


Resulta sorprendente, sin embargo, la escasa preocupación que se advierte por lograr una expresión agradable, una mirada amable o una sonrisa dulce. A nuestro juicio, la cualidad más importante y más difícil de conseguir es esa transparencia del rostro que revela un alma serena y un espíritu tranquilo, esa luz del semblante que desvela un temperamento equilibrado y una profunda paz interior.


La belleza humana es una imagen visible de ese bienestar que nace en el fondo de la conciencia; la elegancia es, no lo olvidemos, un lenguaje que, dotado de significante y de significado, habla, transmite y comunica mensajes; la armonía entre los miembros corporales resplandece cuando es el reflejo directo del equilibrio de las facultades espirituales, cuando descubre los sentidos profundos que orientan toda la vida. Por eso, se concentra en el brillo de una mirada limpia y se difunde en el resplandor de una sonrisa tranquila. ¿Por qué -me pregunto- para lograr una expresión más agradable, más atrayente y más serena, no desarrollamos el mismo esfuerzo que desplegamos, por ejemplo, para disimular una arruga?




José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo.


41.- «MALESTAR»,
(Claves del bienestar humano)




martes, 26 de julio de 2016

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
XVIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO,
Ciclo “C” (31 de JULIO de 2016)

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “C”  (2015 — 2016)

«XVIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO»
(31 de JULIO de 2016)

«El pobre cristiano
es el que comunica
sus propios bienes
a otros que lo necesitan
o los desean;
y no consiste tanto en dar
como en compartir.
La fracción del pan
es su símbolo perfecto.
El espíritu de pobreza
manifiesta el Amor cristiano
en el compadecer (padecer con)
y conduce necesariamente
a anteponer las necesidades
 y los deseos de los que se ama
a los propios deseos
y a las propias necesidades».
(Rovirosa, OC, T.I. 145)
Una de las causas de esta situación
se encuentra en la relación
que hemos establecido con el dinero.


En su origen hay una crisis antropológica:
la negación de la primacía del ser humano.

Hemos creado nuevos ídolos.

La adoración del antiguo becerro de oro
ha encontrado una versión nueva
y despiadada en el fetichismo del dinero,
y en la dictadura de la economía
sin un rostro y sin un objetivo
verdaderamente humano.

(EG 288)

ESCUCHA LA PALABRA…

San Lucas 12,13-21:

“Lo que has acumulado,
¿de quién será?”

[…]

(…continúa…)

Señor, Jesús,
te ofrecemos
todo el día,
nuestros trabajos,
nuestras luchas,
nuestras alegrías,
y nuestras penas.

María, Madre de los pobres,
Ruega por nosotros.
----------------------------------------------------------------------------------
31 de julio de 2016
18º DOMINGO DEL
TIEMPO ORDINARIO (C)

Lectura del libro del Eclesiastés 1,2; 2,21-23
¿Qué saca el hombre de todo su trabajo?

Salmo 89, 3-4. 5-6. 12-13. 14 y 17
Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 3,1-5. 9-11
Buscad los bienes de allá arriba, donde está Cristo.

Lectura del santo evangelio según san Lucas 12,13-21
Lo que has acumulado, ¿de quién será? 
----------------------------------------------------------------------------------
Rico ante Dios.

El mundo es una realidad pasajera (1 Lect.).

No conviene confiar en los bienes de la tierra (Ev.).

Es necesario, en cambio, pensar en las “cosas de arriba”
evitando todo aquello que pueda perjudicar
la realización del hombre nuevo (2 Lect.).

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs

Le agradecemos haga uso de esta página
y esperamos que las orientaciones
para la oración le sean de provecho.

Si no la recibe y quiere hacerlo, puede solicitarla
enviándonos su dirección electrónica a:
hoaccadizyceuta@gmail.com
y se la enviamos para cada domingo.


domingo, 24 de julio de 2016

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
«FIESTA DE SANTIAGO EL MAYOR, APÓSTOL» , PATRONO DE ESPAÑA Ciclo “C” (25 de JULIO de 2016)


«Solemnidad del apóstol Santiago,
hijo del Zebedeo y hermano
de san Juan Evangelista,
que con Pedro y Juan
fue testigo de la transfiguración
y de la agonía del Señor.
Decapitado poco antes
de la fiesta de Pascua
por Herodes Agripa,
fue el primero
de los apóstoles
que recibió la corona
del martirio».
(elogio del
Martirologio
Romano).

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “C”  (2015 — 2016)

«FIESTA DE SANTIAGO
EL MAYOR, APÓSTOL»
PATRONO DE ESPAÑA
(25 de JULIO de 2016)

ESCUCHA LA PALABRA…
Lectura del libro de los Hechos
de los Apóstoles 4,33; 5,12. 27-33; 12,2
El rey Herodes hizo pasar a cuchillo a Santiago.

Salmo 66, 2-3. 5. 7-8
Oh Dios, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.

Lectura de la segunda carta del apóstol
san Pablo a los Corintios 4,7-15
Llevamos en el cuerpo la muerte de Jesús.

Lectura del santo evangelio
según san Mateo 20,20-28
Mi cáliz lo beberéis.

«BEBER DEL MISMO CÁLIZ»

El apóstol Santiago cumplirá el reto
que lanza Jesús a él y a su hermano.

La primera lectura es un acta martirial.

El apóstol Santiago fue el primer apóstol
que murió por el evangelio (1 Lect.).

Beber el cáliz significa pasar
por la experiencia de
la muerte en Cristo (Ev.).

Pablo teologiza sobre
la vocación martirial del apóstol
porque lleva en sí
la muerte de Cristo (2 Lect.).
Señor, Jesús,
te ofrecemos
todo el día,
nuestros trabajos,
nuestras luchas,
nuestras alegrías,
y nuestras penas.

María, Madre de los pobres,
Ruega por nosotros.

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs

Le agradecemos haga uso de esta página
y esperamos que las orientaciones
para la oración le sean de provecho.

Si no la recibe y quiere hacerlo, puede solicitarla
enviándonos su dirección electrónica a:
hoaccadizyceuta@gmail.com
y se la enviamos para cada domingo.


«41.- MALESTAR» (Claves del bienestar humano),
por José Antonio Hernández Guerrero




Malestar



Estoy sorprendido por las interesantes preguntas que me han formulado y por las sugerentes cuestiones que los lectores me han apuntado al hilo de las ideas vertidas en el artículo sobre el bienestar. Como es natural, muchas de las opiniones no coinciden con mis planteamientos, de la misma manera que las experiencias en las que aquéllas se apoyan son diferentes e, incluso, opuestas a las mías. No caeré en la pretensión -errónea e inútil- de defender con argumentos una convicción basada, como ya indiqué, en mi experiencia personal sólo válida para mí y para aquellos que la hayan vivido de manera análoga.


Aprovecho, sin embargo, la oportunidad para aclarar algunas confusiones que en varios comentarios sobre los obstáculos al bienestar se repiten en los mails que he recibido. Hemos de reconocer, en primer lugar, que el malestar causado por las enfermedades, por los dolores y por los sufrimientos -realidades humanas estrechamente relacionadas entre sí- nos son manifestaciones idénticas.


El malestar generado por las enfermedades, que son afecciones comunes a todos los seres vivientes -a las plantas, a los animales y a los humanos- son unos avisos que, amenazadores, nos anuncian la muerte; son las advertencias que, insistentes, nos recuerdan que somos débiles frente a la fuerza agresora de la naturaleza, y son unos síntomas que, claramente, nos revelan que llevamos encerrados en el interior de nuestras entrañas los enemigos de nuestra propia supervivencia. Los dolores los padecemos todos y sólo los seres animados -no las plantas- constituyen llamadas de atención de mal funcionamiento de las piezas de nuestro complejo organismo; son las alertas que se encienden para comunicar el fallo de algún órgano; son las señales que nos comunican que algún mecanismo corporal está estropeado.


Los sufrimientos, en el sentido estricto, son propiedades peculiares de los seres humanos; son ambivalentes prerrogativas que nos distinguen de los demás vivientes; son las resonancias negativas, los ecos profundos -racionales e irracionales- de los dolores físicos, de las agresiones psicológicas o de los ataques morales: los dolores atacan el cuerpo y los sufrimientos hieren el alma. El sufrimiento es una operación de la mente que interpreta el dolor y mide sus dimensiones; es una reacción de la conciencia a los estímulos desagradables; es una respuesta humana en la que interviene de manera directa la inteligencia, la imaginación y, sobre todo, la emotividad. Pero el sufrimiento es, además, una de las vías más seguras y más directas para penetrar en el fondo secreto de las realidades humanas, una clave segura para conocer el sentido profundo de los sucesos. Baudelaire, con vigor, entusiasmo y hondura, nos dice que la verdad reside en el sufrimiento, en el dolor que es la nobleza más ilustre: la única aristocracia de este mundo, que completa y humaniza turbadoramente la visión de las cosas.




José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo.


40.- «EL BIENESTAR»,
(Claves del bienestar humano)




martes, 19 de julio de 2016

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
XVII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO,
Ciclo “C” (24 de JULIO de 2016)


«Hay que buscar primero,
el Reino de Dios y su justicia,
esforzándonos para que ese Reino llegue
y para que la voluntad de Dios se haga,
así en la Tierra como en el Cielo.
Entonces hay paz, bienestar, alegría…
no como un regalo suplementario
al Reino de Dios,
sino como algo que le está unido
intrínsecamente.
Verdaderamente esto es hacer
la revolución de los Hijos de Dios».
(Rovirosa, OC. T.III. 545)

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “C”  (2015 — 2016)

«XVII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO»
(24 de JULIO de 2016)
 No sirven ni las propuestas místicas
sin un fuerte compromiso social y misionero,
ni los discursos y praxis sociales y pastorales
sin una espiritualidad que transforme el corazón…
Siempre hace falta cultivar un espacio interior
que otorgue sentido cristiano
al compromiso y a la actividad (EG 262)


[Para  seguir  leyendo  o  bajar
 el  documento...]



ESCUCHA LA PALABRA…

San Lucas 11,1-13:
Pedid y se os dará:
“Señor, enséñanos a orar”
[…]
(…continúa…)

Señor, Jesús,
te ofrecemos
todo el día,
nuestros trabajos,
nuestras luchas,
nuestras alegrías,
y nuestras penas.

María, Madre de los pobres,
Ruega por nosotros.

----------------------------------------------------------------------------------
24 de julio de 2016
17º DOMINGO DEL
TIEMPO ORDINARIO (C)

Lectura del libro del Génesis 18, 20-32
No se enfade mi Señor, si sigo hablando.

Salmo 137, 1-2a. 2bc-3. 6-7ab. 7c-8
Cuando te invoqué, Señor, me escuchaste.

Lectura de la carta del apóstol
san Pablo a los Colosenses 2,12-14

Os dio vida en Cristo, perdonándoos
todos los pecados.


Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,1-13
Pedid y se os dará.

La oración consiste en dialogar con Dios.
Abrahán, el amigo de Dios, intercede ante su Señor
por los habitantes de las dos ciudades
amenazadas de destrucción (1 Lect.).
Jesús, el Maestro, enseña a orar a sus discípulos
y les exhorta a ser perseverantes en la misma (Ev.).
La oración cristiana nos une al Señor, como el bautismo
nos une estrechamente con Cristo muerto y resucitado (2 Lect.).

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs

Le agradecemos haga uso de esta página
y esperamos que las orientaciones
para la oración le sean de provecho.

Si no la recibe y quiere hacerlo, puede solicitarla
enviándonos su dirección electrónica a:
hoaccadizyceuta@gmail.com
y se la enviamos para cada domingo.


sábado, 16 de julio de 2016

«40.- EL BIENESTAR»
(Claves del bienestar humano),
por José Antonio Hernández Guerrero




El bienestar



De manera rápida e improvisada -como tú me pides- responderé a tu directa y urgente pregunta: ¿Existe el bienestar? Te contesto: sí.


Te aseguro que, en esta ocasión, no he pedido ayudas a teorías acreditadas ni a doctrinas probadas. Mi respuesta -inmediata, ingenua e irreflexiva- sólo se apoya en la experiencia personal: en la mía, en la tuya, en la nuestra. Traigo a la memoria algunos de esos momentos intensos en los que, extasiados, la hemos disfrutado y, también, recuerdo ese estado de ánimo permanente, ese bienestar razonable, inseguro y tenue, que hemos alcanzado -eso sí- desarrollando unos esfuerzos ímprobos. Tú has podido comprobar cómo, apoyándonos mutuamente, es posible mantener los equilibrios inestables de la convivencia, prolongar los días huidizos y ahondar los fugaces minutos de nuestra corta existencia.


Tú -igual que yo- has gozado de esas chispas instantáneas, conmovedoras y fascinantes, que nos habían producido una simple mirada penetrante, un gesto complaciente, una suave caricia, una sosegada meditación, un encuentro afortunado, una compañía grata, un intenso silencio, la armoniosa cadencia de una melodía musical o, simplemente, la luz matizada de cualquier atardecer; tú -igual que yo- te has deleitado con esas partículas minúsculas, densas y sabrosas, que eran capaces de sazonar todas las fibras de nuestra existencia humana; tú -igual que yo- has saboreado los aromas sutiles, excitantes y sugestivos que han transformado nuestra visión de la vida.


Pero, también, tú tienes constancia probada de la posibilidad -de la urgente necesidad- de alcanzar el nivel aceptable de un bienestar durable. Para lograrlo, tú -igual que yo, limitación e historia- tienes que aceptar los estrechos límites de tus espacios, superar las arduas dificultades de tus tiempos, dominar a los feroces enemigos de tu identidad y pagar los altos costes del desánimo, de la indolencia o de la apatía: no tenemos más remedio que trabajar, luchar y sufrir.


El bienestar es una meta suprema y un objetivo irrenunciable que, tenaz y paradójicamente, hemos de perseguir y alcanzar mientras que, ansiosos, recorremos los caminos zigzagueantes de un mundo dislocado y mientras que, fatigados, subimos las empinadas sendas de un universo desarticulado. Ya sé que tú -igual que yo- abrigas la profunda convicción de que algunos tesoros humanos, los más valiosos, no pueden ser devaluados por el desgaste de la rutina, por el deterioro de las enfermedades ni, siquiera, por la decadencia de la senectud.




José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo.


39.- «DESHOLLINAR LA MENTE»,
(Claves del bienestar humano)




martes, 12 de julio de 2016

ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
XVI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO,
Ciclo “C” (17 de JULIO de 2016)

«Cuando el corazón
descansa en Dios,
todo lo provisional
es definitivo…».
(Rovirosa,
OC, T.V. 212)

ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “C” (2015 — 2016)

«XVI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO»
(17 de JULIO de 2016)

María sabe reconocer
las huellas del Espíritu de Dios
en los grandes acontecimientos
y también en aquellos
que parecen imperceptibles.

Es contemplativa
del misterio de Dios
en el mundo, en la historia,
y en la vida cotidiana
de cada uno y de todos.

Es la mujer orante
y trabajadora en Nazaret,
y también es
Nuestra Señora
de la prontitud,
la que sale
de su pueblo
para auxiliar
a los demás
sin demora.
(EG 288)


ESCUCHA LA PALABRA…

San Lucas 10,38-42:
“Marta lo recibió en su casa.
María ha escogido la parte mejor”
[…]
Señor, Jesús,
te ofrecemos
todo el día,
nuestros trabajos,
nuestras luchas,
nuestras alegrías,
y nuestras penas.

María, Madre de los pobres,
Ruega por nosotros.

----------------------------------------------------------------------------------
17 de julio de 2016
16º DOMINGO DEL
TIEMPO ORDINARIO (C)

Lectura del libro del Génesis 18,1-10a
Señor, no pases de largo junto a tu siervo.

Salmo 14, 2-3ab. 3cd-4ab. 5
¿Quién puede habitar en tu monte santo, Señor?.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 1,24-28
El misterio escondido desde siglos, revelado ahora a los santos.

Lectura del santo evangelio según san Lucas 10,38-42
Marta lo recibió en casa. María escogió la parte mejor.

La acogida. La hospitalidad es de siempre.
Abrahán acoge a los tres personajes
y Dios le ofrece el don de la vida (1 Lect.).
Las hermanas de Lázaro acogen a Jesús en su casa.
La hospitalidad pide servicio y escucha (Ev.).
El que acoge el misterio de Cristo
lo debe anunciar sin descanso hasta que
todos lleguen a la madurez plena de Cristo (2 Lect.).

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs

Le agradecemos haga uso de esta página
y esperamos que las orientaciones
para la oración le sean de provecho.

Si no la recibe y quiere hacerlo, puede solicitarla
enviándonos su dirección electrónica a:
hoaccadizyceuta@gmail.com
y se la enviamos para cada domingo.


lunes, 11 de julio de 2016

NOTICIAS OBRERAS DE JULIO 2016:
«CRISTO OBRERO».


Editorial de Noticias Obreras
Núm. 1.585 - JULIO 2016


«Solo la fraternidad nos permitirá crecer en humanidad.
Ese servicio nos reclama ser defensores constantes de la justicia debida a los empobrecidos y testigos de la fuerza humanizadora de la misericordia para la vida personal y social».







«CRISTO OBRERO»
EDITORIAL DE NOTICIAS OBRERAS DE JULIO 2016:



Hace poco más de un año de la publicación de la Instrucción Pastoral de la Conferencia Episcopal Española, Iglesia, servidora de los pobres, que nos propone a las comunidades cristianas un programa de vida y acción al servicio de la sociedad y, en particular, de los pobres.



¿Estamos atendiendo esa propuesta?



¿Qué nos pide la actual situación de nuestra sociedad?



Como ya dijimos con motivo de la publicación de la Instrucción[1], consideramos que nos pide una profunda conversión para ser mejores testigos de la misericordia de Dios en nuestra sociedad, poniendo en el centro de nuestra existencia (toda la Iglesia, cada comunidad cristiana y cada cristiano) la vida y la situación de los empobrecidos, que es la manera concreta de que el centro sea realmente Jesucristo.



Esto mismo es lo que necesita nuestra sociedad: solo la fraternidad nos permitirá crecer en humanidad.



Ese servicio nos reclama ser defensores constantes de la justicia debida a los empobrecidos y testigos de la fuerza humanizadora de la misericordia para la vida personal y social.



Para ello necesitamos poner más nuestra vida junto a la de los pobres y caminar juntos.



Y desde ahí, colaborar al cambio de mentalidad hacia la fraternidad que necesita nuestra sociedad, a transformar las estructuras e instituciones sociales injustas, a promover y apoyar iniciativas sociales que nos ayuden a vivir de otra manera, más justa, fraterna y solidaria.



Iglesia, servidora de los pobres contiene dos afirmaciones que nos parecen especialmente importantes en este sentido.



El llamamiento que se hace en el número 20 a plantearnos otros objetivos sociales, otro modelo social que nos libere del círculo infernal de un pervertido crecimiento económico, que descarta personas porque ha descartado lo humano, sustituyéndolo por un proyecto común de lucha contra la pobreza, de justicia y de solidaridad.



Y el que se hace en el número 32 a empeñarnos socialmente en la defensa y promoción del trabajo digno (y no de cualquier tipo de empleo) como camino imprescindible para luchar contra la pobreza y la exclusión, y para posibilitar el crecimiento humano de las personas y de la sociedad.






Prestar este servicio en el mundo obrero y del trabajo nos pide a la Iglesia vivir con mucha más profundidad y radicalidad lo expresado en las Jornadas de Pastoral Obrera con motivo de los 20 años del documento La Pastoral Obrera de toda la Iglesia: «Ser Iglesia en el mundo obrero […]



No se trata tanto de llevar a Cristo ahí, como de encontrar a Cristo ahí […]



Ver en el rostro y en las manos del obrero a Cristo.



Es el Cristo Obrero quien está perdiendo sus derechos, el que está siendo machacado […]



Es el rostro de Cristo.



Cuando identificas a tu Salvador, a tu Redentor ahí, te involucra mucho más (Guillermo Rovirosa).



Poner la realidad del mundo obrero en la vida de la Iglesia.



Cuando el obrero pierde derechos es como si también la Iglesia estuviera perdiendo.



Una Iglesia que sufre con la gente su dolor.



Esa gente es hija del amor de Dios»…



Y desde ahí aportar caminos de esperanza y de liberación[2].







 Diálogo y participación Este editorial está abierto a tu valoración.

Para ello, se publicará en la web y en redes sociales el 13 de julio.

Te animamos a valorarlo con la etiqueta #Editorial1585




[1] 1 noticias obreras, nº 1.572, junio 2015, Editorial.
[2]  2 Gasda, Élio Estanislau. Teología del trabajo, en Dignidad y esperanza en el mundo del trabajo. EDICE. Madrid. 2016, pp. 125-126.





Ver:

● Publicaciones HOAC: http://www.hoac.es/publicaciones/

● Editoriales de Noticias Obreras:

● Números anteriores de Noticias Obreras:

● Números del Periódico ¡TÚ!:

● Acceso digital Solo para Suscriptores.






domingo, 10 de julio de 2016

«39.- DESHOLLINAR LA MENTE»
(Claves del bienestar humano),
por José Antonio Hernández Guerrero




Deshollinar la mente



Algunos de mis amigos escritores regalan periódicamente aquellos libros que no volverán a releer. Recuerdo, por ejemplo, cómo Fernando Quiñones repetía que él era un lector y un escritor, pero no un bibliotecario: “por eso -explicaba- me desprendo de la mayoría de las obras que ya he leído”.


Yo me atrevo a ir un poco más lejos y, de vez en cuando, practico el saludable ejercicio de deshollinar mi memoria para limpiarla de las telarañas mentales, de las ideas, de los pensamientos y de las convicciones que ya no me sirven y me impiden pensar con libertad y sentir con autonomía. Estoy convencido de que una limpieza a fondo de la mente es tan aconsejable como el barrido que periódicamente hacemos en nuestros hogares; la higiene mental exige que desechemos esa información sobrante que nos aturde, nos bloquea y nos empacha. También el espíritu debe evacuar las basuras porque, como nos enseñan los psicólogos, una de las funciones de la memoria es olvidar.


Aunque es conveniente que recordemos los errores que hemos cometido con el fin de evitar repetirlos, también es saludable que, al menos, evitemos que nos sigan torturando aquellas equivocaciones que condicionan nuestras relaciones con las personas con las que convivimos. Para lograr el daño que algunos recuerdos nos causan es eficaz que aceptemos que la vida tiene una parte incómoda, molesta, dolorosa y, a veces, injusta; sí, hemos de reconocer inteligentemente que tenemos que cargar con esos fardos -a veces pesados- que depositan en nuestros hombros los otros. Por eso, además de dolernos, nos resultaría práctico que interpretáramos con benevolencia esos fallos ajenos y, sobre todo, que evitáramos extraer conclusiones erróneas sobre las intenciones de los demás. Para lograr nuestro propio bienestar, hemos de seguir aprendiendo a olvidar y a perdonar a los otros y, sobre todo, a nosotros mismos. El verano es otra ocasión propicia para ventilar la mente y para renovar el aire viciado, encerrado en algunos de los pliegues de nuestras entrañas. Que descanséis, amigos.




José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo.


38.- «DISFRUTAR »,
(Claves del bienestar humano)




ORAR EN EL MUNDO OBRERO:
XV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO,
Ciclo “C” (10 de JULIO de 2016)

«El buen Amor
es el amor operante,
cuya operación máxima
consiste en dar la vida
por los que se ama…».
(Rovirosa, OC. T.I. 145)


Dibujos de Cerezo


ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “C”  (2015 — 2016)

«XV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO»
(10 de JULIO de 2016)
En una civilización
paradójicamente herida
de anonimato y, a la vez,
obsesionada por la vida de los demás…
la Iglesia necesita la mirada cercana,
para contemplar, conmoverse,
y detenerse ante el otro
cuantas veces sea necesario…


Tenemos que darle a nuestro caminar
el ritmo sanador de projimidad,
con una mirada respetuosa
y llena de compasión
pero que al mismo tiempo
sane, libere y aliente a madurar
en la vida cristiana…
(EG 169)



ESCUCHA LA PALABRA…

San Lucas 10,25-37:
“¿Quién es mi prójimo?”
[…]
Señor, Jesús,
te ofrecemos
todo el día,
nuestros trabajos,
nuestras luchas,
nuestras alegrías,
y nuestras penas.
 

María, Madre de los pobres,
Ruega por nosotros.

----------------------------------------------------------------------------------
10 de julio de 2016
15º DOMINGO DEL
TIEMPO ORDINARIO (C)

Lectura del libro del Deuteronomio 30,10-14
El mandamiento está muy cerca de ti; cúmplelo.

Salmo 68, 14 y 17. 30-31. 33-34. 36ab y 37
Humildes, buscad al Señor,
y revivirá vuestro corazón.


Lectura de la carta del apóstol
san Pablo a los Colosenses 1,15-20

Todo fue creado por él y para él.

Lectura del santo evangelio
según san Lucas 10,25-37

¿Quién es mi prójimo?
----------------------------------------------------------------------------------
La lección del Samaritano y de Jesucristo.
La primera lectura invita a recordar y practicar
el mandamiento de Dios (1 Lect.).
El evangelio subraya quién es nuestro prójimo.
Ayudar al próximo es colaborar en la construcción
de una sociedad fundamentada en el amor (Ev.).
Cristo, que vino de lo alto,
se acercó amorosamente a la humanidad caída,
como buen samaritano, para redimirla en la cruz (2 Lect.).

Las oraciones semanales y el material de la HOAC
lo podéis encontrar archivado en:
http://issuu.com/hoac/docs

Le agradecemos haga uso de esta página
y esperamos que las orientaciones
para la oración le sean de provecho.

Si no la recibe y quiere hacerlo, puede solicitarla
enviándonos su dirección electrónica a:
hoaccadizyceuta@gmail.com
y se la enviamos para cada domingo.


sábado, 2 de julio de 2016

«38.- DISFRUTAR»
(Claves del bienestar humano),
por José Antonio Hernández Guerrero




Disfrutar



Disfrutar es una de las aspiraciones universales más ansiadas y, al mismo, más difíciles de satisfacer. Depende, en gran medida, de que las situaciones en las que nos encontremos sean favorables y, sobre todo, de que nuestras propias disposiciones personales sean las adecuadas. Por eso, en estos primeros días del verano os deseo que aprovechéis esas condiciones ambientales que ayudan a lograr la felicidad como, por ejemplo, el ocio, la salud, el descanso, la diversión, el paseo, la lectura, el juego y la paz.


De manera más o menos consciente la aspiración al disfrute forma parte de todos los demás objetivos personales o solidarios que nos proponemos. Es posible que los prejuicios contra el disfrute sensorial y, sobre todo, contra el goce sensual estén determinados por aquella interpretación errónea de la ascética cristiana ampliamente predicada durante los tres últimos siglos -y mucho más en la Edad Media- o, quizás, por una reacción generalizada ante la ubicua y agresiva publicidad consumista actual, pero el hecho cierto es que, en algunos ambientes -sobre todo religiosos-, existe una seria resistencia a valorar positivamente el disfrute de los sentidos. Quizás por eso, cuando nos referimos a la sensibilidad, solemos definirla como una facultad despojada de sus sustanciales dimensiones corporales.


A veces, cuando reflexionamos sobre el bienestar humano, nos olvidamos de que las resonancias corporales son esenciales e inevitables en los diferentes ámbitos estéticos e, incluso, morales. No siempre caemos en la cuenta de que, por muy íntimo que sea el disfrute y por muy espiritual que sea el goce, siempre están compuestos de un significante material y de significado mental, de una forma corporal y de un fondo conceptual, emotivo e imaginario: hasta las melodías más sublimes y los cuadros más nobles están ejecutados con sonidos y con colores que impresionan nuestros oídos y nuestra vista. Por eso, si pretendemos pasar lo mejor posible la vida, a pesar de sus inevitables amarguras, deberíamos esforzarnos para educar nuestros sentidos -todos los sentidos- con el fin de disfrutar más con las cosas sintiéndolas, palpándolas, saboreándolas y degustándolas.


Hemos de partir del supuesto de que la belleza y el bienestar residen, todavía más que en las cosas y en los episodios, en nosotros mismos, en nuestra manera de contemplarlas y de digerirlas. Permitidme -queridos amigos- que os haga una confidencia: los días que salgo a la calle dispuesto a ver cosas bonitas, las encuentro por todos los lados: incluso en algunas personas menos favorecidas descubro diversos detalles que me hacen disfrutar. Cuando, por el contrario, me encuentro en esos días en los que experimento cierto desánimo, tengo la impresión de que la bruma difumina los perfiles de los transeúntes y se oscurece el horizonte del paisaje: me parece que todo es un poco más feo, más triste y más desangelado.


Estas consideraciones adquieren relevancia -como es sabido- cuando nos referimos, por ejemplo, a las manifestaciones amorosas o a las expresiones estéticas. Tanto cuando amamos como cuando creamos obras bellas, lo hacemos con el cuerpo y con el espíritu: con la vista, con el oído, con el olfato, con el gusto y con el tacto, y, también, con la imaginación, con la esperanza, con el temor y con el amor. ¡Qué disfrutéis amigos!




José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo.


37.- «NUESTRAS VACACIONES»,
(Claves del bienestar humano)