PÁGINAS COMPLEMENTARIAS

jueves, 20 de octubre de 2022

ORAR EN EL MUNDO OBRERO «XXX DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO» (23 DE OCTUBRE DE 2022) CICLO “C”


30º Domingo del Tiempo Ordinario C
• 23 octubre 2022

20 OCTUBRE 2022 | POR 

Queridas hermanas y hermanos:

Necesitamos
ser conscientes
de nuestra realidad,
reconocernos
en nuestra debilidad
y no engañarnos
a nosotros mismos.

Hemos de luchar cada día
contra nuestra tentación
de dejarnos llevar
por el desamor,
por el pecado.

No se trata de insanas
culpabilizaciones
(el amor de Dios
no nos acusa
ni culpabiliza),
sino de ser realistas
y honestos
con nosotros mismos,
no acomodándonos
sino abriéndonos
al amor de Dios
que siempre
nos está invitando
y posibilitando caminar
en el amor a los/as hermanos.

El amor de Dios
siempre nos perdona,
sana y libera para que
respondamos
de forma humana
y agradecida.

Oramos para esto.

Un abrazo en Cristo Obrero,

y ¡hasta mañana en el altar!

Fernando Carlos Díaz Abajo
Consiliario General HOAC, y

Mª Ángeles Bayo Valderrama
Responsable de Organización
y Vida comunitaria.



Del evangelio según
san Lucas 18,9-14.
«Ten compasión
de este pecador».

Dios nos regala un proyecto de felicidad:
vivir para el amor y la comunión
de una manera libre y consciente.

Dios nos ha creado para la vida,
y la vida es la comunión en el amor
con los hermanos,
con la naturaleza y con Él.

Y nos ha dado las capacidades que nos permiten
construir ese proyecto de humanización y felicidad,
que Dios ha dejado en nuestras manos,
en nuestra propia decisión y responsabilidad,
porque el amor solo puede vivirse desde la libertad.

 

Compártelo en redes y entre tus contactos:

https://www.hoac.es/wp-content/uploads/2022/10/30o-Domingo-TO.pdf 


«ORAR CON LA IGLESIA»

30ª Semana del Tiempo Ordinario (Ciclo ‘C’)
Del 23 al 29 de octubre de 2022.


 

JORNADA MUNDIAL Y COLECTA POR
LA EVANGELIZACIÓN DE LOS PUEBLOS

Santos Servando y Germán, mártires,
Patronos de Cádiz.
San Juan de Capistrano, religioso presbítero.
23 de octubre de 2022.

La liturgia de hoy nos ofrece elementos que nos orientan hacia la meditación en la vida eterna y el fin de los tiempos.  En la oración colecta pedimos conseguir las promesas del Señor, amando sus preceptos.  Así lo expresa también la 2ª lect. con estas palabras de san Pablo: «He luchado el noble combate […].  Me está reservada la corona de la justicia».  Y la celebración de la eucaristía es ya el comienzo y el anticipo de la vida eterna (cf. orac. Después de la comunión).  Pero, siendo esto así, nadie puede presumir de tenerla segura, ya que es un don de Dios que debemos pedir con humildad, puesto que solo Dios es santo y nosotros somos unos pobres pecadores.  Olvidarlo nos llevaría a la soberbia espiritual de despreciar a los demás, actitud denunciada por Jesús en el Ev. de hoy: el publicano bajó a su casa justificado; el fariseo no.


- Sirácida (Eclesiástico) 35,12-14.16-18:
 Los gritos del pobre atraviesan las nubes.

- Salmo 33: R/. Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha.

- 2ª Timoteo 4,6-8.16-18: Ahora me aguarda la corona merecida.

 

Del Evangelio de san Lucas 18,9-14.
“El publicano bajó a su casa justificado, y el fariseo no”.

Dijo Jesús esta parábola a algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los demás: -“Dos hombres subieron al templo a orar.  Uno era fariseo; el otro, un publicano.  El fariseo, erguido, oraba así en su interior: ‘¡Oh Dios!, te doy gracias, porque no soy como los demás: ladrones, injustos, adúlteros; ni como ese publicano’.  El publicano, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo se golpeaba el pecho, diciendo: ‘¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador’.  Os digo que éste bajó a su casa justificado, y aquél no”.

COMENTARIO

Estos dos hombres-mujeres son el prototipo de dos actitudes ante Dios: La de los satisfechos de sí mismos; los que se creen justos, impecables, distintos de los demás; y la de los sinceros, humildes, pobres pecadores que reconocen sus debilidades e indigencias ante Dios.  También nos manifiesta el Evangelio la actitud de Dios frente a estos dos tipos de hombres-mujeres: acogida y perdón para uno y repulsa para el otro.  Al templo va el fariseo y el publicano; el justo y el pecador; el rico y el pobre; el consciente y responsable de su fe y el que va solamente para cumplir.  Pero mientras uno sale igual o peor que lo que entró, el otro sale perdonado, justificado y salvado.  Tu actitud.  ¿A cuál se asemeja más: al fariseo o al publicano?.

ORACIÓN

Dame Señor un corazón sencillo, humilde y generoso para verme como soy, pecador; y reconocer que Tú eres compasivo.  Te pido Señor, que nunca desprecie a los demás, que me vea libre de la arrogancia y la soberbia de creerme mejor que otros.  Señor que siempre los pecadores nos sintamos acogidos por Ti, acogidos también en la Iglesia para que nadie piense que a la Iglesia vamos solo los "buenos".  Oh Dios, ten compasión de este pecador y concédeme la gracia de confiar siempre en tu misericordia.  Oh Dios, ten compasión de este pecador.


San Antonio María Claret, obispo,
fundador de los misioneros claretianos.
24 de octubre de 2022.

Del Evangelio de san Lucas 13,10-17.

“A ésta, que es hija de Abrahán, ¿no había que sanarla en sábado?”.

Un sábado, en una sinagoga había una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin poderse enderezar.  Al verla, Jesús la llamó y le dijo: -“Mujer, quedas libre de tu enfermedad”.  El jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado dijo a la gente: -“Seis días tenéis para trabajar: venid esos días a que os curen, y no los sábados”.  Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo: -“Hipócritas: cualquiera de vosotros, ¿no desata del pesebre al buey o al burro, y lo llevaba a abrevar, aunque sea sábado?.  Y a ésta, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no había que soltarla en sábado?”.  A estas palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se alegraba.

COMENTARIO

Una obra de caridad y misericordia como la que hace Jesús con la pobre mujer enferma y encorvada desde hace dieciocho años, más que constituir una trasgresión del sábado, viene a dar perfecto cumplimiento al sentido y finalidad del mismo: la gloria y el culto a Dios mediante la liberación del hombre de toda esclavitud.  La observancia del sábado o de cualquier ley ha de celebrar ese amor de Dios que quiere el bien del hombre-mujer.  No olvidemos que las leyes deben estar al servicio de las personas y nada hay más “sagrado” que la persona.

ORACIÓN

Señor, admiro como liberas de la enfermedad y de la esclavitud de la ley; admiro que no dependes del juicio de los demás sino de tu propia conciencia, de la voluntad del Padre.  Haz que yo señor sea capaz de vivir según mis convicciones, de vivir escogiendo lo que me hace ser más persona.  Que sepa también liberar a los demás de sufrimientos, de prejuicios, de egoísmos.  Que todos nos veamos liberados por Ti, Cristo Jesús, de nuestros pecados.


Martes de la 30ª Semana T. Ordinario.
Santos Crisanto y Daría, mártires.
San Gaudencio de Brescia, obispo.
25 de octubre de 2022.

Del Evangelio de san Lucas 13,18-21.
Crece el grano y se hace un arbusto”.

 

Jesús decía: -“¿A qué se parece el reino de Dios?  ¿A qué lo compararé?  Se parece a un grano de mostaza que un hombre toma y siembra en un huerto; crece, se hace un arbusto y los pájaros anidan en sus ramas”.  Y añadió: -“¿A qué compararé el Reino de Dios?.  Se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina, hasta que todo fermenta.

 

COMENTARIO

Las dos parábolas contrastan los comienzos insignificantes y el gran desarrollo final se acentúa en la primera el crecimiento en extensión y en la segunda la profundidad.  En uno y otro caso, gracias a la fuerza intrínseca.  Así sucederá con el reino la fuerza intrínseca del mismo acabará transformando el mundo entero.  Una fuerza que sólo es visible por la fe.  En las dos parábolas se ve el éxito final garantizado por la propia fuerza interna.  Que este evangelio ayude a vivir con mayor confianza en Dios que nos garantiza un final feliz.

 

ORACIÓN

Vive feliz, vive en paz, te lo suplico; piensa que éstas en las manos de Dios fuertemente cogido para que tu vida llegue a feliz éxito, confía en Dios que te quiere.  El transformará tus esfuerzos en triunfo, tus tinieblas en luz, tus miedos en paz, tus sufrimientos en vida nueva.  El hará que crezca en ti todo lo que hay de bondad, de comprensión, de fraternidad, de fe, Él hará que crezca en ti la semilla de vida nueva que recibiste en el bautismo.  Vive feliz, vive en paz, te lo suplico; piensa que éstas en las manos de Dios.


Miércoles de la 30ª Semana T. Ordinario.
Santos Luciano y Marciano, mártires.
26 de octubre de 2022.

Del Evangelio de san Lucas 13,22-30.
Vendrán de oriente y occidente, y se sentarán a la mesa en el Reino de Dios”.

Jesús les dijo: -"Esforzaos en entrar por la puerta estrecha.  Os digo que muchos intentarán entrar y no podrán.  Diréis: ‘Señor, ábrenos’; y él os replicará: ‘No sé quiénes sois’.  Entonces comenzaréis a decir: ‘Hemos comido y bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas’.  Pero él os replicará: ‘No sé quiénes sois.  Alejaos de mí, malvados’.  Entonces será el llanto y el rechinar de dientes.  Mirad: hay últimos que serán primeros y primeros que serán últimos".

COMENTARIO

Se oye decir que Dios es bueno y no puede castigar; que es Padre y no puede condenar.  Y es verdad.  Se tiene razón al afirmar eso.  Dios es bueno y no castiga.  Dios no condena.  Somos nosotros quienes nos cerramos la puerta.  Somos nosotros, quienes nos salvamos o nos perdemos.  Dios ofrece un camino y nosotros lo aceptamos o lo rechazamos y Dios respeta nuestra decisión.  Jesús habla de puerta estrecha e incluso que puede cerrarse.  Es una llamada a nuestra responsabilidad.

ORACIÓN

Señor, no dejes que muramos en nuestras cegueras.  Ábrenos la puerta de la vida, y que nuestra esperanza alimentada por tu Espíritu nos conceda participar del gozo eterno.  Danos el valor de esforzarnos por entrar en el Reino para que un día no tengamos que lamentarnos de esta oportunidad desaprovechada.  Señor ayúdanos a emprender de nuevo el camino que lleva a la Pascua, a la Resurrección.


Jueves de la 30ª Semana T. Ordinario.
San Evaristo, papa.  San Oterano, monje.
27 de octubre de 2022.

Del Evangelio de san Lucas 13,31-35.
“No cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén”.

Se acercaron unos fariseos a decirle: -“Márchate de aquí, porque Herodes quiere matarte".  Él contestó: -"Id a decirle a ese zorro: ‘Hoy y mañana seguiré curando y echando demonios; pasado mañana llego a mi término’.  ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían!.  ¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la clueca reúne a sus pollitos baja las alas!  Pero no habéis querido”.

COMENTARIO

Jesús, ante el aviso que le hacen sobre las intenciones de Herodes de matarle, contesta que no teme a Herodes ni sus amenazas porque confía plenamente en el Padre y es preciso que siga su camino hasta que se cumpla plenamente la voluntad del Padre.  En Jerusalén quedará sellado su destino.  Allí su misión será coronada en el calvario.  Pero hasta entonces ningún poder humano podrá cambiar el rumbo de su caminar.  Un camino y un final que acepta voluntariamente.

ORACIÓN

Señor que nunca me vuelva atrás en el compromiso de amor a mis hermanos, en el empeño de hacerles felices, aunque me crucifiquen.  Que mirando el ejemplo de Jesús sepa confiar plenamente en Ti Padre y caminar sin sobresaltos en el cumplimiento de tu voluntad.  También quiero darte las gracias Señor, por tantas veces que me cobijas, que me pones a la sombra de tus alas, que me recoges en tu regazo.  Señor que nunca me vuelva atrás en el compromiso de amor a mis hermanos.


San Simón y San Judas Tadeo, apóstoles
Viernes de la 30ª Semana T. Ordinario.
28 de octubre de 2022.

Fiesta de san Simón y san Judas, apóstoles, el primero apellidado Cananeo o Zelotas, y el segundo, hijo de Santiago, llamado también Tadeo, el cual, en la última Cena preguntó al Señor acerca de su manifestación, recibiendo esta respuesta: «El que me ame, observará mi palabra, y el Padre mío le amará, y vendremos a él y haremos nuestra mansión en él» (elog. del Martirologio Romano).

Del Evangelio de san Lucas 6,12-19.
“Escogió a doce de entre ellos y los nombró apóstoles”.

Subió Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios.  Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, escogió a doce de ellos y los nombró apóstoles: Simón, al que se puso de nombre Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago Alfeo, Simón, apodado el Celotes, Judas el de Santiago y Judas Iscariote, que fue el traidor.  La gente venía a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los atormentados por espíritus inmundos quedaban curados, y la gente trataba de tocarlo, porque salía de él una fuerza que los curaba a todos.

COMENTARIO

Jesús es el verdadero pastor, luz, guía y maestro de la humanidad y de la comunidad de sus seguidores.  Él es el “apóstol”, el auténtico “enviado de Dios.  Y en Él se basa nuestra fe cristiana y el edificio de la Iglesia.  Pero ha sido Él mismo quien ha querido que el grupo de los Doce fuera el fundamento visible de la comunidad, colaboradores suyos, evangelizadores.  Que fueran pastores, guías, maestros: por eso quiso que convivieran con Él antes de enviarlos a su misión.  Simón y Judas fueron llamados por Jesús, le siguieron, estuvieron con Él y luego dieron valiente testimonio, de su fe.  La tradición dice que murieron mártires en Persia.

ORACIÓN

Señor enséñanos a ser como los apóstoles, testigos de la fe, anunciadores de buenas noticias sirviendo a todos, siendo ricos en simpatía y en bondad, con nuestras palabras y obras.  Enséñanos a compartir con los demás y a vivir en comunidad; que en tu nombre sepamos sanar a los enfermos y atormentados por los espíritus; que en tu nombre llevemos a todos la fuerza de la salvación.  Padre; enséñanos a comunicar quién es Jesús: El Señor que vive y reina por los siglos de los siglos.


Sábado de la 30ª Semana T. Ordinario.
San Feliciano, mártir de Cartago.

29 de octubre de 2022.

Del Evangelio de san Lucas 14,1.7-11.
“Todo el que se enaltece será humillado; y el que se humilla será enaltecido”.

Dijo Jesús: -"Cuando te conviden a una boda, no te sientes en puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá: -‘Cédele el puesto a éste.’  Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto.  Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: -‘Amigo, sube más arriba’.  Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales.  Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido".

COMENTARIO

El humilde es capaz de comprender y compartir los problemas del prójimo y por eso tiene una actitud servicial para todos; mientras que el soberbio se despreocupa de todos y solamente le interesa aquello que le favorezca a él, aunque perjudique a otros.  Pero Dios sabe situar a cada uno en el puesto que le corresponde, tal como nos lo dice el Señor en el Evangelio de hoy.  Por eso se realizará lo que Jesús dice: “El que se humilla será ensalzado y el que se ensalza será humillado”.

ORACIÓN

Abaja mi orgullo Señor, quita mis soberbias, enséñame a vivir con humildad, con sencillez, mirando siempre las necesidades y el bienestar del prójimo.  Tú que colocas a cada uno en su puesto, abaja del trono a los soberbios y enaltece a los humildes.  Tú que te revelas a los sencillos y humildes concédeme la sabiduría de los sencillos.  Tú que ciegas a los arrogantes, no permites que “los poderosos” dominen y esclavicen a los más pobres.  Abaja mi orgullo Señor, quita mis soberbias, enséñame a vivir con humildad.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes enviar tu comentario a: