PÁGINAS COMPLEMENTARIAS

miércoles, 4 de enero de 2023

«LA EPIFANÍA DE DIOS EN NUESTRAS VIDAS», por José Manuel Carrascosa Freire




«La Epifanía de Dios en nuestras vidas»



Estamos en un tiempo en la Iglesia en la que, hay quienes les parece necesaria la defensa intra eclesial. Parece que quieren recuperar esas instituciones que en algunas iglesias del pasado llamaron: “Secretariados de defensa de la fe”, esto, que ya se daba en una Iglesia totalizante del pasado, se puede apreciar en instituciones y organizaciones eclesiales ultra conservadoras y en otros movimientos populistas que tratan de volver a una Iglesia del pasado. Lo hemos podido ver en un pasado no demasiado lejano, con el nacional catolicismo de la Iglesia española y de Portugal, tratando defenderse de los enemigos de la fe católica. También, recientemente vemos como el populismo religioso tratan de impulsar una vuelta a la fe tradicional de la historia en Europa, con movimientos ultras políticos y eclesiales que claman la vuelta a la España de la reconquista o la defensa de la Europa de la cultura religiosa sustentada en la prohibición, persecución y estigmatización de sectores de personas en razón de su identidad sexual, de raza, de religión o de ideología, al considerar que estos colectivos van en contra de los valores cristianos. Esto se está dando en países centro europeos y en Rusia.


Hay que decir que esta defensa intraeclesial de la Iglesia es un pecado de iglesia, en tanto que atenta contra los Evangelios, ahí tenemos el Evangelio del amor, la parábola de la levadura en la masa, pues, si la levadura se saca de la masa y se constituye como el todo, se pudre. La levadura solo sirve como tal cuando se sitúa dentro de la masa, por lo tanto, la Iglesia solo tiene sentido, cuando está en la masa "fermentando", si algunas personas o grupos la separa, se pudre la levadura.


La fe no necesita ser defendida. ¿Cómo voy a defender la fe, si pongo como enemigo al otro?. Lo que estaría defendiendo es una doctrina, y la fe no se puede reducir a una simple doctrina, porque la fe es aceptar al otro, al pobre, que es “la Epifanía de Dios en nuestros días”. Sí el otro es para mí el infiel, el extranjero, el homosexual, etc. entonces no es posible la fe. La Iglesia es misionera, profética, liberadora y lo que necesita es que seamos levadura que fermente en el pueblo, en la cultura, en la vida de lo cotidiano.


Reflexión realizada a partir de:

"Teología de la liberación y ética" de Enrique Dussel

https://enriquedussel.com/txt/Textos_Libros/41.Teologia_de_la_liberacion.pdf

Por José Manuel Carrascosa Freire


José Manuel Carrascosa Freire, presidente diocesano de la HOAC (de 2014 a 2019), Representante de la HOAC en el Secretariado diocesano de Pastoral Obrera y Coordinador del Sector 2: «Paro, pobreza marginación y exclusión social generadas por el mercado de trabajo».


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