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UNA MIRADA CRISTIANA DEL TRABAJO HUMANO Y EL BIEN COMÚN
¡ACOGE, ABRAZA, CUIDA, ACOMPAÑA...!
LA VIDA DEL MUNDO OBRERO Y DE LOS POBRES,
CON MISERICORDIA Y COMPASIÓN.


¡Bienvenido/bienvenida! al "blog" de la HOAC diocesana de Cádiz y Ceuta.


jueves, 3 de diciembre de 2020

SALUD, ECONOMÍA Y POLÍTICA, por José Antonio Hernández Guerrero




Salud, economía y política.



La principal consecuencia de la pandemia del Coronavirus está siendo la valoración de la vida humana y, por lo tanto, de la salud como el bien humano primordial. En estos momentos -y ojalá que perdure por mucho tiempo- los demás bienes como son la ciencia, el arte, el trabajo, la diversión y, por supuesto, la economía, están o deberían estar al servicio de la defensa de la vida y de la conservación de la salud física y mental. Esta nueva clasificación de los valores y de las actividades humanas deberían tenerla muy en cuenta, al menos, los políticos de las diferentes ideologías y de los distintos ámbitos de la administración.


Si tenemos en cuenta las consecuencias mortales que estamos sufriendo, carece de sentido ético que discutamos sobre qué es más importante, si salvar vidas humanas, mantener la actividad económica, disfrutar con espectáculos públicos o aumentar el número de votantes para las eventuales elecciones políticas. En esta grave situación no existe otra opción que poner al servicio de la salud las investigaciones científicas, los medios económicos y, por supuesto, las ideas, los objetivos y las estrategias políticas. Todos deberíamos tener claro que el enemigo común, el Covid-19, es más poderoso que cada uno de nosotros por muy importantes, fuertes o listos que seamos. Su maldad está por encima de nuestras astucias estratégicas, de nuestros conocimientos científicos y de nuestros recursos económicos.


Reconozcamos, al menos, que incluso los principales gobiernos de la Unión Europea, de Rusia, de Norteamérica e, incluso de China aún no han sido capaces de vencer totalmente a ese peligroso enemigo. Los científicos, a pesar de los importantes avances alcanzados, se siguen mostrando desconfiados porque reconocen que este virus presenta características nuevas y que, a pesar de sus profundos conocimientos de la organización viral no han sido capaces de prevenir y de controlar sus terribles consecuencias mortales. Entre los economistas y los empresarios ha cundido el pánico tras comprobar la desastrosa influencia del virus en las bolsas de valores, en la caída del precio del petróleo, en la paralización de los préstamos bancarios y en las inversiones.


A mi juicio, la conclusión a la que deberíamos llegar tras este somero análisis es que todos aceptáramos y aplicáramos un principio: no es posible salvar la política, la ciencia ni la economía sin salvar a las personas y, por lo tanto, la salud -la personal y la colectiva- ese es el valor que determina -que debería determinar- la orientación y el nivel de las actividades políticas, científicas y económicas de nuestro país.


José Antonio Hernández Guerrero, reflexiona, semanalmente en nuestro “blog”, sobre las Claves del bienestar humano el sentido de la dignidad humana y el nuevo humanismo. Actualmente, nos envía también una reseña semanal sobre libros de pensamiento cristiano, evangelización, catequesis y teología. Con la intención, de informar, de manera clara y sencilla, de temas y de pensamientos actuales, que gustosamente publicamos en nuestro “blog”.

PARA VER OTROS ARTÍCULOS DE JOSÉ ANTONIO HERNÁNDEZ GUERRERO, PULSAR »AQUÍ«


ORAR EN EL MUNDO OBRERO «SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO» (06 DE DICIEMBRE DE 2020)
CICLO “B”


2º Domingo de Adviento (6 diciembre 2020)

03 DICIEMBRE 2020 | POR 

Queridas hermanas y hermanos:

¿Dónde está mi hermano?

¿Dónde está mi hermana?

La pregunta de Dios
se dirige
a mí personalmente,
a nosotros
como comunidad,
como Iglesia.

¿Cómo hago de mi vida
una vida de cuidado
por mi hermano o
por mi hermana?

¿Quién ha podido
necesitar sentir
mi fraternidad
esta semana y
no la ha encontrado?


Feliz adviento.

Hasta mañana en el altar.

¡A cuidarse para cuidar!

Fernando Carlos Díaz Abajo
Consiliario General HOAC, y

Mª Ángeles Bayo Valderrama
Responsable de Organización
y Vida comunitaria.


 

«En el desierto preparadle un camino al Señor» es el mensaje común de Isaías y Juan Bautista.  Dios viene a salvarnos y tenemos que ir quitando de nuestra vida todo lo que obstaculice esa venida que esperamos (1 lect. y Ev.), que nos traerá «un cielo nuevo y una tierra nueva» (segunda lectura).  El desierto significa el distanciamiento que hemos de tomar respecto de las cosas de este mundo, si queremos percibir y vivir el mensaje salvador de Dios (cf. 1.ª orac. y orac. después de la comunión).  En estos días debemos tratar de convertirnos más al Señor para revivir en la Navidad el misterio del Hijo de Dios que se hizo hombre para que nosotros seamos hijos de Dios.



San Marcos 1,1-8.-
«Preparad el camino al Señor».

Accede a más oraciones aquí.

https://www.hoac.es/que-hacemos/espiritualidad/orar-desde-el-mundo-obrero/

También en Issuu
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https://www.hoac.es/2020/12/03/2o-domingo-de-adviento-6-diciembre-2020/

 

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https://issuu.com/hoac/docs/2o_domingo_adviento

 

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«ORAR CON LA IGLESIA» 

TIEMPO DE ADVIENTO (Ciclo ‘B’) 2ª Semana de Adviento
Del 06 de diciembre al 12 de diciembre de 2020.

Domingo, 2ª Semana de Adviento.
06
de diciembre de 2020.

 

«En el desierto preparadle un camino al Señor» es el mensaje común de Isaías y Juan Bautista.  Dios viene a salvarnos y tenemos que ir quitando de nuestra vida todo lo que obstaculice esa venida que esperamos (1 lect. y Ev.), que nos traerá «un cielo nuevo y una tierra nueva» (segunda lectura).  El desierto significa el distanciamiento que hemos de tomar respecto de las cosas de este mundo, si queremos percibir y vivir el mensaje salvador de Dios (cf. 1.ª orac. y orac. después de la comunión).  En estos días debemos tratar de convertirnos más al Señor para revivir en la Navidad el misterio del Hijo de Dios que se hizo hombre para que nosotros seamos hijos de Dios.

 

Del Evangelio según san Marcos 1,1-8.-
Allanad los senderos del Señor”.

Comienza el Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.  Una voz grita en el desierto: -"Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos".  Juan predicaba que se convirtieran y se bautizaran, para que se les perdonasen los pecados.  Acudía la gente de Judea y de Jerusalén, confesaba sus pecados, y él los bautizaba en el Jordán.  Y proclamaba: -"Detrás de mí viene el que puede más que yo.  Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo". 


COMENTARIO

Juan pregona un bautismo de conversión, de cambio de vida.  Preparad el camino al Señor.  A Dios sólo se le acoge preparando el camino de Jesús el Mesías.  La preparación consiste en la igualación y equiparación definitiva de las relaciones entre los hombres-mujeres, que han de pasar de la desigualdad a la igualdad, de la injusticia a la justicia, expresadas simbólicamente en la nivelación de los terrenos.  No lo olvidemos: no hay acceso a Dios Padre sin búsqueda, concreta y conflictiva, del Reino de fraternidad. 


ORACIÓN

Preparemos los caminos ya se acerca el Salvador y salgamos, peregrinos, al encuentro del Señor.  Ven, Señor, a libertarnos, ven, tu pueblo a redimir; purifica nuestras vidas y no tardes en venir.  Consolaos y alegraos, desterrados de Sión, que ya viene, ya está cerca, Él es nuestra salvación.  Te esperamos anhelantes ya sabemos que vendrás; deseamos ver tu rostro y que vengas a reinar.  Preparemos los caminos ya se acerca el Salvador. 


SAN AMBROSIO, obispo y doctor de la Iglesia,

2ª Semana de Adviento.
Lunes, 07
de diciembre de 2020.

 

 

Del Evangelio de san Lucas 5,17-26.-
“Hoy hemos visto cosas admirables”.

Unos hombres traían en una camilla a un paralítico subieron a la azotea y lo descolgaron delante de Jesús.  Él, viendo la fe que tenían, dijo: -"Hombre, tus pecados están perdonados".  Los escribas y los fariseos se pusieron a pensar: --“¿Quién puede perdonar pecados más que Dios?”.  Jesús, les replicó: -Para que veáis que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar pecados -dijo al paralítico-: -“A ti te lo digo, ponte en pie, toma tu camilla y vete a tu casa”.  Él, levantándose al punto, tomó la camilla y se marchó a su casa dando gloria a Dios. 


COMENTARIO

Jesús reconcilia al hombre con Dios: trae la salvación de Dios a la tierra.  El milagro que hace Jesús es solamente el signo de que la salvación de Dios ha llegado a nosotros.  Cristo viene como fuente de vida y redención.  Por eso, en este Adviento, debemos retirarnos hacia nuestro desierto y reconocer que necesitamos de salvación.  Si así lo hacemos nos sucederá como al paralítico, que salta de alegría y da gracias a Dios, porque veremos cosas admirables en nosotros mismos. 


ORACIÓN

Reconozco Señor que tú eres el Cristo el hijo de Dios el que me puede perdonar los pecados.  Perdóname Señor, pon tu paz en mi alma, ampárame en el sueño y guárdame en tu gracia.  Gracias por el día que se acaba, por el día que empieza por el paso de las horas, por tu amor que no pasa, gracias por lo que me quieres, gracias por ser de nuestra familia y vivir en nuestra casa.  Gracias Señor por tanta gente buena que has puesto en mi jornada.  Gracias por la fe de los que me acompañan.  Gracias Señor, buenas noches, un abrazo, hasta mañana. 


LA INMACULADA CONCEPCIÓN
2ª Semana de Adviento.
Martes, 08
de diciembre de 2020.

 

Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Bienaventurada Virgen María, que, realmente llena de gracia y bendita entre las mujeres en previsión del Nacimiento y de la Muerte salvífica del Hijo de Dios, desde el mismo primer instante de su Concepción fue preservada de toda culpa original, por singular privilegio de Dios.  En este mismo día fue definida el año 1854 por el papa Pío IX como verdad dogmática recibida por antigua tradición (elog. del Martirologio Romano).

 


 

Celebramos hoy que la Virgen María fue concebida sin mancha de pecado original, en previsión de la muerte de Jesucristo y para prepararle una digna morada (cf. 1.ª orac.).  En María Inmaculada se cumple la promesa de Dios: «Pongo hostilidad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y su descendencia» (1 lect.).  Ella, primer miembro de la Iglesia, elegida en la persona de Cristo -antes de crear el mundo- para ser santa e intachable por el amor, es la llena de gracia desde el primer instante de su ser natural (cf. 2 lect. y Ev.).  Que por su intercesión el Señor nos guarde limpios de todo pecado (cf. orac. sobre las ofrendas).

Del Evangelio de san Lucas 1,26-38.-
“Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo”.

El ángel Gabriel dijo a María: -"Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo".  -"No temas, porque has encontrado gracia ante Dios.  Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús.  Y María dijo al ángel: -"¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?".  El ángel le contestó: -"El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios.  María contestó: -"Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra". 

COMENTARIO

María era inmaculada desde el primer instante, no hubo en ella pecado, fue como un enclave de luz en este mundo...  El Evangelio lo dijo más sencillamente: -“Llena de gracia”.  Sólo a Dios pudo ocurrírsele llamar a María, llena de gracia.  Sólo a Dios que ve hondo y ama tanto.  Proclamemos todos la grandeza del Señor.  El poderoso ha hecho obras grandes en ella. María nos supera, es grande, paraíso, bien sin mal, memoria de Dios, maravilla absoluta.  Para vivir esta fiesta hoy reza: -“Dios te salve María…” 

 

ORACIÓN

Virgen María en pecado no caíste como los otros cayeron, que siempre la mano os dieron con que preservada fuiste.  Y yo cien mil veces caído os suplico que me deis la vuestra, y me levantéis porque no quede perdido.  Y por vuestra concepción que fueren tan gran pureza, conserva en mí la limpieza del alma y del corazón, para que de esta manera suba con vos a gozar del que sólo puede dar vida y gloria verdadera.  Amen.  “Alégrate, María, llena de gracia, el Señor está contigo”. 


2ª Semana de Adviento.
Miércoles, 09 de diciembre de 2020.

Del Evangelio de san Mateo 11,28-30.-
“Venid a mí todos los que estáis cansados”.

Tomó Jesús la palabra y dijo: -“Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.  Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis vuestro descanso.  Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera”. 


COMENTARIO

Hoy Jesús nos dice algo a primera vista difícil de entender: para encontrar alivio en los agobios y cruces de la condición humana, hay que aceptar su "yugo".  El "yugo de Cristo" es vivir para los demás por amor.  Es moldear los sentimientos de nuestro corazón según los sentimientos de Jesús, humilde y bondadoso de corazón.  El "yugo de Cristo" nos trae la paz y la libertad, fruto del amor. 


ORACIÓN

Ven, Señor Jesús, te necesitamos, haznos sentir tu presencia, refuerza nuestra fe.  Tú conoces mejor que nadie nuestra debilidad y nuestros miedos.  Ven, y ayúdanos a descubrirte vivo.  Sabemos que te haces presente en el pobre, que te dejas reconocer en las personas que sufren, en quienes viven sin cariño, en cada víctima de cualquier injusticia.  Señor, ¡ábrenos los ojos de la fe!  ¡Ven, Señor Jesús, y siembra tu esperanza.  Amén. 


2ª Semana de Adviento.
Jueves, 10 de diciembre de 2020.

Del Evangelio de san Mateo 11,11-15.-
“No ha nacido uno más grande que Juan el Bautista”.

Dijo Jesús a la gente: -"Os aseguro que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan, el Bautista; aunque el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él.  Desde los días de Juan, el Bautista, hasta ahora se hace violencia contra el reino de Dios, y gente violenta quiere arrebatárselo.  Los profetas y la Ley han profetizado hasta que vino Juan; él es Elías, el que tenía que venir, con tal que queráis admitirlo.  El que tenga oídos que escuche".

 

COMENTARIO

Todas las promesas se han realizado en Jesucristo.  El Adviento nos prepara para recibir a Jesús que hace realidad las promesas de Dios al pueblo de Israel.  Y es un nuevo profeta, Juan Bautista, quien prepara el camino al Señor.  La acción de Dios estará orientada a liberar al hombre de su esclavitud de pecado, a conseguir que florezca la justicia y la paz para los más necesitados, a ofrecer "la fuente de agua que hace brotar vida eterna.  El Adviento ha de empujarnos a preparar la venida de Jesús para que su presencia cambie y haga fértiles nuestras vidas. 

 

ORACIÓN

Por los hombres sedientos de justicia y dignidad, te pedimos: haznos unos apasionados de la justicia y del amor.  Por los pueblos aplastados por la opresión, te pedimos: difunde en nuestros corazones la violencia de la verdad.  Por los profetas que liberan el combate de la esperanza te pedimos: aumenta cada día en ellos la fe.  Por los que queremos escuchar tu palabra te pedimos: danos oídos de fe.  Por los hombres aplastados por el peso de la miseria, ven Jesús dulce y humilde de corazón.  Por los hombres desanimados por el peso de la ley, ven Mesías de los sencillos.  Por los hombres alejados de Dios por despecho y hastío, ven Jesús rostro del Padre.  Por tu bondad ‘Ven Señor Jesús’. 


2ª Semana de Adviento.
Viernes, 11 de diciembre de 2020.

 

Del Evangelio de san Mateo 11,16-19.-
“No escuchan ni a Juan ni al Hijo del hombre”.

Dijo Jesús a la gente:  -"¿A quién se parece esta generación?  Se parece a los niños sentados en la plaza, que gritan a otros: ‘Hemos tocado la flauta, y no habéis bailado; hemos cantado lamentaciones, y no habéis llorado’.  Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dicen: ‘Tiene un demonio’.  Vino el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: ‘Ahí tenéis a un comilón y borracho, amigo de publicanos y pecadores’.  Pero los hechos dan razón a la sabiduría de Dios".

 

COMENTARIO

Las gentes no sintonizan con los mensajes que Jesús les ofrece.  Sin embargo, Jesús cada día nos hace una invitación a vivir la alegría o superar la tristeza, y vivir la salvación.  El gran acontecimiento de la vida de Jesús es que murió y resucitó, haciendo firme su mensaje de salvación.  El Adviento debe ayudarnos a comprender que tenemos que sintonizar con Jesús.  Pidamos que el Señor nos ayude a vivir un Adviento "cristiano".

 

ORACIÓN

Preparar el Adviento es acoger a Jesús que viene, es caminar, acoger la luz que se nos ofrece en las personas y acontecimientos de la vida; es ser buena noticia es sobre todo confiar.  Preparar el Adviento es saber que llegas Señor, saber que vienes, es tener una disposición en el corazón para decir sí a tus proyectos, es ver lo positivo de la vida; es interpretar los acontecimientos de cada día desde la sabiduría de la fe.  No permita Señor que ande buscando los lados oscuros de cada cosa haz que sepa ver y colaborar con todo el bien que hay a mi alrededor.  Preparar el Adviento es acoger a Jesús que viene. 


2ª Semana de Adviento.
Sábado, 12
de diciembre de 2020.

Del Evangelio de san Mateo 17,10-13.-
“Elías ya ha venido y no lo reconocieron”.

Los discípulos preguntaron a Jesús: -"¿Por qué dicen los escribas que primero tiene que venir Elías?".  Él les contestó: -"Elías vendrá y lo renovará todo.  Pero os digo que Elías ya ha venido, y no lo reconocieron, sino que lo trataron a su antojo.  Así también el Hijo del hombre va a padecer a manos de ellos".  Entonces entendieron los discípulos que se refería a Juan, el Bautista. 

COMENTARIO

Era creencia popular que volvería el profeta Elías a preparar el camino del Mesías.  Aparece Juan que presenta las mismas características del profeta Elías.  Pero la gente no conoció al bautista como el nuevo Elías y tampoco descubrió en Jesús al Mesías prometido.  Si el Bautista murió en el cumplimiento de su misión, a Jesús no le espera una suerte distinta, pues el martirio forma parte del ministerio profético.  Pidamos al Señor en este Adviento que nos ayude a recibirle como Salvador. 

ORACIÓN

Dios bondadoso que la venida de tu hijo ahuyente las tinieblas del pecado y nos manifieste como hijos de la luz.  Cuando vengas Señor que sepamos reconocerte como el Salvador y que sepamos tratarte como lo que eres: el Hijo de Dios.  Que nuestros antojos no oscurezcan nuestra mirada de fe.  Cuando vengas Señor amanecerá en nuestros corazones el resplandor de tu gloria.  Cuando vengas Señor concédenos un favor que sepamos acogerte con alma limpia y corazón generoso.  Amén.