Foto: DIARIO DE CÁDIZ REDACCIÓN DE CHICLANA
Lugar en el que se produjo ayer (27 enero 2010) el accidente,
en el polígono industrial Pelagatos de Chiclana.
Un accidente laboral acabó ayer con la vida de un hombre de unos 20 años en el polígono Pelagatos de Chiclana, cayó sobre él una pila de palés cargada de elementos metálicos
Tenemos que lamentar la muerte de un trabajador de a 21 años en Chiclana, en el polígono Pelagatos.
El suceso tenía lugar en la tarde de ayer cuando el operario sufría un accidente tras caerle encima una pila de palés cargada con elementos metálicos en la que quedó atrapado.
El operario se encontraba manipulando una pila horizontal de un metro y medio que contenía unos 400 palés, dentro de una nave industrial, cuando uno de estos palés se le vino encima y quedó atrapado de cintura para abajo.
Cuando los Bomberos llegaron al lugar, un grupo de operarios había intentado sacar el cuerpo del herido. Los efectivos intervinieron de inmediato en el rescate con ayuda de unas pinzas separadoras, con las que consiguieron elevar la chapa y liberar el cuerpo del hombre, atrapado de cintura para abajo.
Una vez finalizado el rescate, los Bomberos arrastraron en el cuerpo al exterior de la nave y el operario fue atendido por los servicios sanitarios.
Al lugar se desplazaron una dotación de 5 Bomberos del parque de Chiclana con tres vehículos.
Los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por reanimarlo y que fallecía poco después.
La muerte del jóven Domingo Valdivia Mateo, a punto de cumplir los 22 años y vecino de Chiclana, se inscribe dentro de una situación, que por desgracia, alcanza a miles de trabajadores. Los accidentes laborales no suceden porque sí, ni por fatalidad, la mayoría de las veces ocurren por que no se ponen los medios para evitarlos.
Expresamos nuestra solidaridad con la familia del jóven Domingo y con la de todos los que han perdido a un ser querido en el trabajo.
Denunciamos la injusticia que supone encontrar la muerte en el puesto de trabajo, cuando el trabajo es para la vida.
«Estamos frente a una realidad más amplia, que se puede considerar como una verdadera y auténtica estructura de pecado, caracterizada por la difusión de una cultura contraria a la solidaridad, que en muchos casos se configura como verdadera “cultura de muerte”.
Esta estructura está activamente promovida por fuertes corrientes culturales, económicas y políticas portadoras de una concepción de la sociedad basada en la eficiencia». (Evangelium Vitae nº 12).
Como trabajadoras y trabajadores, nos queremos unir al inmenso dolor de los familiares y allegados del jóven Domingo, ofreciéndoles nuestra más fraternal solidaridad, y al mismo tiempo, expresar la rabia y la impotencia que sentimos, como personas del Mundo Obrero y como cristianos, ante esta cruda realidad que tan a menudo nos está sacudiendo.
EL TRABAJO ES PARA LA VIDA
NI UNA MUERTE MÁS
NI UNA MUERTE MÁS
"...Y que los obreros muertos en el campo de honor
del trabajo y de la lucha, descansen en paz."
del trabajo y de la lucha, descansen en paz."
Fuente: DIARIO DE CÁDIZ
Un operario de una empresa de señalización de carreteras falleció ayer en Chiclana a consecuencia de las graves heridas sufridas en un accidente laboral ocurrido a primera hora de la tarde en la nave de dicha firma en el polígono industrial Pelagatos.
El finado, Domingo Valdivia Mateo, a punto de cumplir los 22 años y vecino de Chiclana, se encontraba, según fuentes del Consorcio de Bomberos, manipulando una pila de un metro y medio aproximadamente que contenía unos 400 palés metálicos dentro de la nave, en la calle Progreso del citado parque industrial. Fue en ese momento cuando se le vino encima uno de estos palés, quedando atrapado bajo la estructura de cintura para abajo.
En un primer momento fueron los operarios de la empresa los que intentaron rescatar a su compañero, aunque finalmente tuvieron que ser los bomberos del Parque de Chiclana, que se encuentra a escasos metros del lugar del suceso, los que llevaran a cabo el rescate. Cuando los bomberos llegaron, un grupo de trabajadores intentaban sacar el cuerpo del herido, interviniendo los efectivos de inmediato en el rescate con ayuda de unas pinzas separadoras. Con este instrumento los bomberos consiguieron elevar la chapa y liberar el cuerpo del joven, atrapado de cintura para abajo.
Una vez finalizado el rescate, los miembros del Parque de Bomberos trasladaron al joven hasta el exterior de la nave, donde fue atendido por los servicios sanitarios del 112 que se personaron en el lugar de los hechos.
Pese a los intentos del dispositivo sanitario por reanimar al trabajador, nada se pudo hacer por salvarle la vida, falleciendo poco después.
El cadáver del finado fue trasladado al tanatorio de Servisa, en la Zona Franca de Cádiz, donde, según fuentes de la Guardia Civil, se le practicará la autopsia en la jornada de hoy.
Hasta el lugar del suceso se desplazó, además de la Guardia Civil y los servicios sanitarios, una dotación de cinco bomberos del Parque de Chiclana, con tres vehículos: una autobomba urbana ligera, una autobomba urbana pesada y un vehículo de rescate, todo ello para agilizar el rescate. En las labores del mismo, los bomberos utilizaron unas pinzas separadoras y diversas herramientas de mano, llevándose a cabo esta actuación de urgencia entre las tres y cuarto y las cuatro menos cuarto de la tarde.
El finado, Domingo Valdivia Mateo, a punto de cumplir los 22 años y vecino de Chiclana, se encontraba, según fuentes del Consorcio de Bomberos, manipulando una pila de un metro y medio aproximadamente que contenía unos 400 palés metálicos dentro de la nave, en la calle Progreso del citado parque industrial. Fue en ese momento cuando se le vino encima uno de estos palés, quedando atrapado bajo la estructura de cintura para abajo.
En un primer momento fueron los operarios de la empresa los que intentaron rescatar a su compañero, aunque finalmente tuvieron que ser los bomberos del Parque de Chiclana, que se encuentra a escasos metros del lugar del suceso, los que llevaran a cabo el rescate. Cuando los bomberos llegaron, un grupo de trabajadores intentaban sacar el cuerpo del herido, interviniendo los efectivos de inmediato en el rescate con ayuda de unas pinzas separadoras. Con este instrumento los bomberos consiguieron elevar la chapa y liberar el cuerpo del joven, atrapado de cintura para abajo.
Una vez finalizado el rescate, los miembros del Parque de Bomberos trasladaron al joven hasta el exterior de la nave, donde fue atendido por los servicios sanitarios del 112 que se personaron en el lugar de los hechos.
Pese a los intentos del dispositivo sanitario por reanimar al trabajador, nada se pudo hacer por salvarle la vida, falleciendo poco después.
El cadáver del finado fue trasladado al tanatorio de Servisa, en la Zona Franca de Cádiz, donde, según fuentes de la Guardia Civil, se le practicará la autopsia en la jornada de hoy.
Hasta el lugar del suceso se desplazó, además de la Guardia Civil y los servicios sanitarios, una dotación de cinco bomberos del Parque de Chiclana, con tres vehículos: una autobomba urbana ligera, una autobomba urbana pesada y un vehículo de rescate, todo ello para agilizar el rescate. En las labores del mismo, los bomberos utilizaron unas pinzas separadoras y diversas herramientas de mano, llevándose a cabo esta actuación de urgencia entre las tres y cuarto y las cuatro menos cuarto de la tarde.
Fuente: LA VOZ DIGITAL
Un joven chiclanero de 21 años falleció ayer en el tajo al caerle encima decenas de quitamiedos que estaba apilando en la nave que su empresa, Señalizaciones Ortega, tiene en el polígono industrial de Pelagatos de Chiclana.
Los hechos ocurrieron apenas unos minutos después de las tres de la tarde. El operario trabajaba con una pila horizontal de metro y medio de altura que contenía una carga de quitamiedos metálicos que estaba almacenando en el interior de la empresa, cuando uno de éstos elementos se le vino encima y quedó atrapado de cintura para abajo.
De inmediato algunos de sus compañeros acudieron en su auxilio, e intentaron rescatar al joven sin éxito. En pocos minutos llegaron los servicios de emergencias sanitarias, además de cinco efectivos del Consorcio de Bomberos, cuyo parque se encuentra cerca del recinto industrial.
Los esfuerzos de los profesionales se centraron entonces en tratar de rescatar al joven, que ya recibía asistencia médica, utilizando para ello unas pinzas separadoras con las que consiguieron elevar la chapa y liberar el cuerpo del trabajador.
El joven falleció a causa de las heridas producidas por el desplome de un material que superaba los 2.000 kilos de peso. En un primer momento, los servicios de emergencia no pudieron alertar a su familia de que había muerto. Por eso, cuando la madre llegó, creía que su hijo sólo había resultado herido y se encontró de golpe con la dolorosa noticia.
Alrededor de las cinco de la tarde la plantilla de la empresa se reunía en las instalaciones de la empresa, consternados por lo sucedido. Todos los que estaban trabajando en el momento del accidente tuvieron que prestar declaración en el cuartel de la Guardia Civil en calidad de testigo.
Esta forma de proceder se enmarca dentro del protocolo de actuación en materia de siniestralidad laboral, impulsado por la Fiscalía para frenar las muertes en el tajo. Al lugar del accidente se desplazaron dos fiscales que dirigieron las primeras pesquisas de la Guardia Civil. Se han abierto diligencias para determinar si la empresa cumplía las medidas de seguridad. Fuentes de la investigación señalaron que los primeros indicios apuntan a posibles irregularidades.
Un joven chiclanero de 21 años falleció ayer en el tajo al caerle encima decenas de quitamiedos que estaba apilando en la nave que su empresa, Señalizaciones Ortega, tiene en el polígono industrial de Pelagatos de Chiclana.
Los hechos ocurrieron apenas unos minutos después de las tres de la tarde. El operario trabajaba con una pila horizontal de metro y medio de altura que contenía una carga de quitamiedos metálicos que estaba almacenando en el interior de la empresa, cuando uno de éstos elementos se le vino encima y quedó atrapado de cintura para abajo.
De inmediato algunos de sus compañeros acudieron en su auxilio, e intentaron rescatar al joven sin éxito. En pocos minutos llegaron los servicios de emergencias sanitarias, además de cinco efectivos del Consorcio de Bomberos, cuyo parque se encuentra cerca del recinto industrial.
Los esfuerzos de los profesionales se centraron entonces en tratar de rescatar al joven, que ya recibía asistencia médica, utilizando para ello unas pinzas separadoras con las que consiguieron elevar la chapa y liberar el cuerpo del trabajador.
El joven falleció a causa de las heridas producidas por el desplome de un material que superaba los 2.000 kilos de peso. En un primer momento, los servicios de emergencia no pudieron alertar a su familia de que había muerto. Por eso, cuando la madre llegó, creía que su hijo sólo había resultado herido y se encontró de golpe con la dolorosa noticia.
Alrededor de las cinco de la tarde la plantilla de la empresa se reunía en las instalaciones de la empresa, consternados por lo sucedido. Todos los que estaban trabajando en el momento del accidente tuvieron que prestar declaración en el cuartel de la Guardia Civil en calidad de testigo.
Esta forma de proceder se enmarca dentro del protocolo de actuación en materia de siniestralidad laboral, impulsado por la Fiscalía para frenar las muertes en el tajo. Al lugar del accidente se desplazaron dos fiscales que dirigieron las primeras pesquisas de la Guardia Civil. Se han abierto diligencias para determinar si la empresa cumplía las medidas de seguridad. Fuentes de la investigación señalaron que los primeros indicios apuntan a posibles irregularidades.