22º Domingo del Tiempo Ordinario (3 septiembre)
Queridas hermanas y hermanos:
El comienzo de un nuevo curso
supone siempre un nuevo desafío,
que nos pide habitar la Cruz,
como lugar de residencia habitual.
Con las resonancias
de la reciente asamblea,
mirando la Cruz
del mundo obrero
como nuestro lugar
de residencia,
acojo las situaciones,
las vidas,
las personas
a las que con alegría
estoy invitado/a
a entregarme con amor.
Desde ellas oro.
¡Hasta mañana en el altar!
Del evangelio según
san Mateo 16,21-27.
«Quien quiera
salvar su vida,
la perderá».
¡Cuánto nos parecemos a
Pedro!
Como él, quisiéramos
un cristianismo sin cruz,
sin lucha ni conflicto,
un cristianismo de bienestar
y plácida tranquilidad,
de seguridades y certezas,
desde las que hacer
poco esfuerzo
en el seguimiento,
sin tener que dejarnos la vida
en mil batallas por el Reino.
Mi
actitud ante la Cruz,
y ante las cruces,
ante los crucificados,
y ante el dolor
de la humanidad
dice en qué punto del camino
del seguimiento estoy
y lo que aún me queda
por convertir de mi vida.
En la oración discierno
los pasos a dar
en el seguimiento de Jesús,
para cargar con la Cruz.
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22ª Semana del Tiempo Ordinario (Ciclo ‘A’)
Del 03 al 09 de septiembre de 2023.
Domingo 22º del Tiempo Ordinario.
San Gregorio Magno, papa y doctor de la Iglesia.
03 de septiembre de 2023.
Como
Jeremías y otros profetas del Antiguo Testamento sufrieron por ser fieles a su
vocación de anunciar la Palabra de Dios (1 Lect), así también nuestro Señor Jesucristo sufrirá la
persecución y la muerte en cruz por parte de las autoridades judías y
romanas. Y si esto es así, los que
quieran ser discípulos de Cristo, no podrán buscarse a sí mismos sino que
tendrán que negarse a sí mismos cargando con su cruz, perdiendo su vida por él,
para así encontrarla (Ev). Hay, por
tanto, que vencer la tentación de utilizar la religión en provecho propio. Buscando así su voluntad en todo, seremos
sacrificio vivo y agradable a Dios.
- Jeremías
20,7-9: La palabra del Señor se volvió oprobio para mí.
- Salmo
62: R./ Mi alma está sedienta de ti, Señor Dios mío.
- Romanos
12,1-2: Ofreceos vosotros mismos como hostia viva.
Del Evangelio de san Mateo 16,21-27.
“El que
quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo”.
Jesús empezó a explicar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y padecer allí mucho y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día. Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo: -"¡No lo permita Dios, Señor!. Eso no puede pasarte". Jesús se volvió y dijo a Pedro: -"Quítate de mi vista, Satanás, que me haces tropezar; tú piensas como los hombres, no como Dios".
COMENTARIO
Jesús, muestra a sus discípulos, que su camino mesiánico pasa por el sufrimiento y la muerte antes de llegar a la resurrección. Esto crea un nuevo tipo de incomprensión de parte de los discípulos: Ya que se puede aceptar al Mesías y, sin embargo, rechazar que deba sufrir. La reacción de Pedro muestra que, a pesar de su confesión pasada, su comprensión del misterio de Jesús es imperfecta. A todos los discípulos les dice Jesús cuál es el camino del seguimiento: -"El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz y me siga".
ORACIÓN
Señor, también a mí me cuesta aceptar el sufrimiento y el dolor, me cuesta verte y reconocerte en el que sufre, en el que padece la injusticia… pienso como los hombres-mujeres, no como Dios. Por eso hoy vengo Señor a pedirte fe para negarme a mí mismo, fe para cargar con mi cruz cada día y sobre todo Señor fe para seguirte según tus criterios y tus modos de pensar. …Y que nunca olvide Señor que este camino me lleva a la resurrección. …Y que nunca olvide Señor que este camino me lleva a la resurrección.
Lunes de la 22ª Semana T. Ordinario.
Santa Rosalía, virgen.
04 de septiembre de 2023.
Del Evangelio de san
Lucas 4,16-30.
Ningún profeta es bien mirado en su tierra”.
Fue Jesús a Nazaret, donde se había criado; entró en la sinagoga, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías encontró el pasaje donde estaba escrito: -“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos la vista. Para dar libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor”.
COMENTARIO
Jesús proclama un evangelio de liberación para el presente. Por eso el cristianismo es fe anclada en la realidad, que es el hoy de Dios. No somos nostálgicos del pasado, ni es la Iglesia una comunidad vuelta hacia el ayer, ni siquiera la celebración de un culto. Pues éste no es memoria muerta, sino actualización de la fe de los hechos salvadores de Dios por Cristo Jesús. Hemos de vivir alegremente cada día como el “hoy” eterno de Dios, redescubriendo por la fe la Palabra que nos hace nacer cada día para Dios en el Espíritu de Cristo resucitado.
ORACIÓN
Concédenos, Señor, el reconocerte como libertador, que nos traes la Buena Noticia a los pobres, reconocerte como el que nos trae libertad y luz; gracia de Dios. Permítenos también redescubrir tu rostro de Mesías, de Hijo de Dios encarnado para nuestra Salvación. Señor, Tú te has manifestado en la humildad de nuestra carne; que este misterio de tu encarnación lo vivamos en la fe y el gozo de sentir tu Presencia cercana. Danos una fe intrépida en Ti y en tu Buena Noticia de Salvación.
Martes de la 22ª Semana T. Ordinario.
Santa Teresa
Gonhxa Bojaxhiu,
«Madre Teresa de Calcuta», virgen y fundadora.
05 de septiembre de 2023.
Del Evangelio de san
Lucas 4,31-37.
“Sé quién eres: El Santo de Dios”.
En aquel tiempo, Jesús bajó a Cafarnaúm, ciudad de la Galilea, y los sábados enseñaba a la gente. Se quedaban asombrados de su enseñanza, porque hablaba con autoridad. Había en la sinagoga un hombre que tenía un demonio inmundo, y se puso a gritar a voces: -"¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno?. ¿Has venido a destruirnos?. Sé quién eres: el Santo de Dios".
COMENTARIO
Jesús hace su aparición en la vida pública, sus paisanos “se admiraban”. Pero no aceptaron su doctrina. Vivimos en una sociedad de opiniones más que de hondas convicciones personales. Todos seríamos un poco mejores, un poco más espirituales y “cristianos” si supiéramos independizarnos de las voces que vienen de abajo para seguir las inspiraciones que llegan de arriba. Sin la visión que da el Espíritu vemos en Jesús al hijo de María, sin llegar a descubrir al Hijo de Dios.
ORACIÓN
Di con el corazón: Jesús es el Señor. Dilo con los labios: Jesús es el Señor. Grábalo en tus entrañas: Jesús es el Señor. Pero cántalo con la conducta de tu vida: Jesús es el Santo de Dios. Señor Tú eres para mi antorcha de libertad, fuente de alegría, viento de paz victoria sobre el mal. Tú que eres el Hijo de Dios destruye el mal que hay en mi vida, quita los demonios de mi egoísmo, de la envidia, de la soberbia… y con tu autoridad de Hijo de Dios enséñame que Dios es mi Padre. Di con el corazón: Jesús es el Señor. Dilo con los labios: Jesús es el Señor.
Miércoles de la 22ª Semana T. Ordinario.
San Eleuterio, abad.
San Zacarías, santo del AT.
06 de septiembre de 2023.
Del Evangelio de san
Lucas 4,38-44.
el Reino de Dios, para eso me han enviado”.
Jesús entró en casa de Simón. La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta, y le pidieron que hiciera algo por ella. Él, de pie a su lado, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella, levantándose en seguida, se puso a servirles. Al ponerse el sol, los que tenían enfermos con el mal que fuera, se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre cada uno, los iba curando. Y les dijo: -"También a los otros pueblos tengo que anunciarles el reino de Dios".
COMENTARIO
A veces desearíamos un Dios doméstico para solucionar nuestros pequeños problemas. ¿Por qué entonces se prodigaban los milagros y ahora no?. ¿No podría Dios intervenir con decisión y autoridad al menos en las cosas más graves?. Sí puede, pero no lo hace. La misión de Cristo no es hacer milagros, sino anunciar el Reino de Dios. La liberación de Jesús se hace extensiva a todos los hombres-mujeres de todos los tiempos, víctimas de los mismos errores fundamentales, de las mismas esclavitudes, de las mismas enfermedades morales. La Iglesia recuerda que es necesario vivir la fe en sencillez y fidelidad, no en la búsqueda ansiosa de milagros.
ORACIÓN
Señor no vengo en este día a pedirte milagros, pero desearía de corazón vivir con más fe. Fe en Ti Señor, en tu poder Salvador. Fe en que Tú puedes sanar mis ansias, mis angustias, mis cobardías. Tengo fe en que Tú puedes curar mi fiebre de tener más, mi fiebre de vanidad, mi orgullo. Pon tus manos sobre mi Señor para que te sirva en los hermanos/as. Pon tus manos sobre mi Señor para que te sirva en los hermanos/as.
Jueves de la 22ª Semana T. Ordinario.
Santa Regina, mártir.
07 de septiembre de 2023.
Del Evangelio de san
Lucas 5,1-11.
“Dejándolo todo, lo siguieron”.
Jesús dijo a Simón: -"Rema mar adentro y echad las redes para pescar". Simón contestó: -"Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes". Y, puestos a la obra, hicieron una redada de peces tan grande, que reventaba la red. Al ver esto, Simón Pedro, se arrojó a los pies de Jesús, diciendo: -"Apártate de mí, Señor, que soy un pecador". Jesús dijo a Simón: -"No temas: desde ahora serás pescador de hombres".
COMENTARIO
¿Hay algo en nuestra vida que no esté representado en este episodio?. En él están el día y la noche, el éxito y el fracaso, la amargura del desengaño y la alegría de la bendición, Dios y nosotros. Allí está el hombre-mujer con su lógica impotencia, Jesús con sus paradojas, su poder y sus sorpresas. Se entrevén los problemas del cansancio profesional, del éxito y los fracasos, de la vana autosuficiencia y la fecundidad de aceptar las insinuaciones del Señor. De tal manera debemos esforzarnos en el trabajo del Reino como si todo dependiera únicamente de nosotros; y al mismo tiempo, de tal manera debemos confiar en Dios como si todo el éxito dependiera exclusivamente de Él.
ORACIÓN
Por tu palabra lo intentaré de nuevo Señor. Intentaré vivir la alegría de la Salvación, intentaré un nuevo esfuerzo para anunciar tu bondad, intentaré convivir con más armonía. Aunque soy un pecador por tu palabra intentaré vivir en la santidad, en la justicia, en el amor y el servicio a los/as hermanos/as. Porque me fío de tu palabra, hoy intentaré vivir como hijo/a de Dios. Por tu palabra lo intentaré de nuevo Señor.
Natividad de la Bienaventurada Virgen María.
Viernes de la 22ª Semana T. Ordinario.
08 de septiembre de 2023.
Fiesta de la Natividad de la
Bienaventurada Virgen María, de la estirpe de Abrahán, nacida de la tribu de
Judá y de la progenie del rey David, de la cual nació el Hijo de Dios, hecho
hombre por obra del Espíritu Santo, para liberar a la humanidad de la antigua
servidumbre del pecado (elog. del Martirologio Romano).
Del Evangelio de san
Mateo 1,1-16.18-23.
“La criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo”.
Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán. Abrahán engendró a Isaac, Isaac a Jacob, Jacob a Judá y a sus hermanos y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo.
COMENTARIO
Como en todas las fiestas marianas, el centro de nuestra fe sigue siendo Cristo, el Hijo de María. Por eso en el Evangelio leemos la genealogía de Cristo. Él es el verdadero sol, al que sucedería la aurora de María: “Tu nacimiento, Virgen Madre de Dios, anuncia la alegría a todo el mundo: De ti nació el sol de la justicia, Cristo, nuestro Dios”. Pero si el Hijo de Dios se hizo de nuestra familia en lo humano, fue como hijo de María, de la raza de David: “Hoy es el nacimiento de la gloriosa Virgen María, descendiente de Abraham, de la tribu de Judá y de la noble estirpe de David”. Al celebrar con gozo esta fiesta, esperamos todos que de ella nos venga aumento de gracia y de paz: “Cuantos hemos recibido las primicias de la salvación por la maternidad de la Virgen María, consigamos aumento de paz en la fiesta de su nacimiento”.
ORACIÓN
Madre, guarda mi corazón puro y transparente, como el agua. Un corazón sencillo. Un corazón grande para darse, tierno para compadecerse. Un corazón fiel y generoso que no olvide ningún bien ni guarde recuerdo de ningún mal. Llévame de tu mano. Condúceme por los caminos de Cristo. Limpia mi mirada para descubrir las necesidades de los que me rodean. Fortalece mi voluntad para hacer el bien y preséntame tú ante el Padre para agradecerle todo y pedirle perdón por todas mis torpezas y faltas.
Sábado de la 22ª Semana T. Ordinario.
San Pedro Claver,
religioso presbítero.
09
de septiembre de 2023.
Del Evangelio de san
Lucas 6,1-5.
“¿Por qué hacéis en sábado lo que no está permitido?”.
Un sábado, Jesús atravesaba un sembrado; sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas con las manos, se comían el grano. Unos fariseos les preguntaron: -"¿Por qué hacéis en sábado lo que no está permitido?". Jesús les replicó: -"El Hijo del hombre es señor del sábado".
COMENTARIO
El sábado era “muy sagrado” en la ley judía; se vivía para él. Y el Señor viene a implantar una interpretación distinta de este día: El sábado está orientado a ayudar al hombre-mujer a encontrarse con Dios pero no para esclavizarlo. El Señor tiene que insistir que el sábado ha sido hecho para el hombre-mujer y no es posible que el hombre-mujer quede esclavizado por el sábado. El sábado, “el día del Señor” no es una meta, sino un camino para nuestro encuentro con Dios.
ORACIÓN
Jesús, Señor, que en el sábado liberaste a los hombres-mujeres y pasaste haciendo el bien. Que hoy comprenda que lo importante en la vida de los hombres-mujeres es: “Crear vida, regalar esperanza, ofrecer ayuda y consuelo, estar cerca de quien sufre, dar lo que otros pueden necesitar de nosotros. Que nunca ponga las leyes y normas por delante de las personas y que nunca confunda mis deseos con la voluntad de Dios. Señor que al menos hoy sepa: Crear vida, regalar esperanza, ofrecer ayuda y consuelo.
LECTURA DE LA PALABRA
EN CLIMA DE ORACIÓN
1.
Hago silencio, exterior e interior.
Estoy
en la presencia del Señor:
Contemplo a Dios que me quiere, me acoge, me escucha, me habla.
2.
Petición:
«Humildemente te pido, a ti, Señor, que eres la luz verdadera y la fuente misma de toda luz, que, meditando fielmente tu Palabra, viva siempre en tu claridad. Por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor».
3.
Palabra de Dios:
Leo tranquila y detenidamente el texto evangélico para hoy, en comunión con toda la Iglesia. Me fijo bien en todos los detalles.
4.
Ante la Palabra
leída:
Ø ¿Qué dice este texto? (Lectura honda: circunstancias, actitudes…).
Ø ¿Qué me dice a mí, personalmente? (Meditación).
Ø Desde esto, ¿qué te digo yo ahora, Señor? (Oración).
Ø ¡Quiero identificarme contigo, Señor!. ¿Qué hacer?.
(Contemplación, iluminación de mi vida concreta).
5.
Oración:
Hay una oración-reflexión propia de cada día, como inicio de respuesta
al texto evangélico. Al final puede
añadirse la siguiente:
«Gracias, Señor, por tu presencia y tu cercanía en este rato de oración; y por la luz y la fuerza que me has dado. Ayúdame a vivir según tu voluntad y sirviendo siempre a mis hermanos/as. Por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor».