VER:
Vamos
a fijarnos en aquellos hermanos nuestros
que han querido acompañar con su vida
la infame realidad de los excluidos y marginados,
de los olvidados y descartados…
vueltos ellos mismos uno más de los empobrecidos
y vejados del mundo obrero…
que han querido acompañar con su vida
la infame realidad de los excluidos y marginados,
de los olvidados y descartados…
vueltos ellos mismos uno más de los empobrecidos
y vejados del mundo obrero…
Dibujos de Cerezo
ORAR EN EL MUNDO OBRERO
Ciclo “B” (2014-2015)
Ciclo “B” (2014-2015)
«EL MODELO DE PASTOR»
4º DOMINGO DE PASCUA
(26 de abril de 2015)
«Las verdaderas víctimas del templo
no son los animales, sino el pueblo mismo;
mientras el templo se ha convertido
en una casa de negocios (Jn 2,16)
y acumula bienes en el tesoro (Jn 8,20),
el pueblo está reducido a la miseria...
no son los animales, sino el pueblo mismo;
mientras el templo se ha convertido
en una casa de negocios (Jn 2,16)
y acumula bienes en el tesoro (Jn 8,20),
el pueblo está reducido a la miseria...
No hay que estudiar nada
para trasponer aquel templo
al actual templo del Capital».
para trasponer aquel templo
al actual templo del Capital».
----------------------------------------------------------------------------------
26 de abril de 2015
Cuarto Domingo de Pascua (B)
26 de abril de 2015
Cuarto Domingo de Pascua (B)
Ningún otro puede salvar.
Salmo 117 1 y 8-9. 21-23. 26 y 28-29
La piedra que desecharon los arquitectos
es ahora la piedra angular.
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3, 1-2
Veremos a Dios tal cual es.
Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 11-18
El buen pastor da la vida por las ovejas.
El pastoreo de Jesús y de la Iglesia.
La liturgia nos presenta la imagen mesiánica del pastor.
Aparece ya en el AT, prefigurando al Mesías.
Jesús, el Buen Pastor, conoce a sus ovejas
y ofrece su vida por ellas (Ev.).
Pedro, después de haber curado al paralítico, reconoce que,
fuera de Cristo muerto y resucitado, no hay salvación,
sólo él puede curar y salvar (1 lect.).
Dios Padre nos ha amado por Cristo hasta tal punto que
nos ha hecho sus hijos y herederos de su reino (2 lect.).