Núm. 1.530 [01-12-11 / 31-12-11]
«EL HAMBRE COMO PECADO CULTURAL»
«Dios ha dado la tierra a todo el género humano
para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni
privilegiar a ninguno» (CA, 31)
Mientras los mercados nos llevan de sobresalto en
sobresalto y seguimos comentando el resultado de nuestras pasadas elecciones,
el hambre y la miseria en el mundo y entre nosotros siguen creciendo. ¿No hay
recursos suficientes para todos?
«Dios ha dado la tierra a todo el género
humano para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni
privilegiar a ninguno» (CA, 31). Pero según la FAO, 25 mil personas mueren de
hambre cada día y 6 millones de niños menores de 5 años mueren cada año, 11 por
minuto.
«Dios ha dado la tierra a todo el género
humano para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni
privilegiar a ninguno». Pero la producción de las 500.000 toneladas de armas
químicas capaces de destruir 60 mil millones de hombres, almacenadas en la
ex-Unión Soviética, costó alrededor de 200 mil millones de dólares, y su
destrucción costará otro tanto.
«Dios ha dado la tierra a todo el género
humano para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni
privilegiar a ninguno». Pero el Premio Nóbel de Economía, Joseph E. Stiglitz,
ha denunciado en su libro «Una guerra de 3 billones de dólares: Los gastos
reales del conflicto en Irak», la barbaridad que supone el gasto de esta guerra
cruel e innecesaria. Tres billones de dólares es mucho dinero.
«Dios ha dado la tierra a todo el género
humano para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni
privilegiar a ninguno». Pero en el año 2000, los especuladores dedicaron 5 mil
millones de dólares a «jugar» con los precios de los alimentos. A mediados de
2008, cambiaron el ladrillo por los alimentos y esta especulación alcanzó los
300 mil millones. No tenemos los datos actuales, pero sí sabemos que las
cosechas de los próximos años, las que aún no se han sembrado, están siendo
compradas y vendidas cada día a precios especulativos, a unos precios que los
que mueren de hambre jamás podrán pagar.
La codicia de los poderosos, la desidia de
los gobiernos y la pasividad de las personas cambian el Plan de Dios. Codicia,
desidia y pasividad que son cubiertas y disimuladas por todo un entramado de
leyes, costumbres, instituciones y normas que establecen la enorme distancia
que hay entre la magnitud del problema y lo que cada persona, cada gobierno y
la misma comunidad internacional pueden hacer para resolverlo. Hay tantos
problemas para resolver el problema que se termina sin hacer nada relevante y
lamentándose de la situación. Pero no es verdad, no hay ni tanta distancia ni
tantos problemas, hay excusas, falta de voluntad para gastar dinero en salvar
vidas humanas en lugar de gastarlo en salvar a los especuladores. «Son
frecuentes, nos dice Benedicto XVI, los intentos de justificar los
comportamientos y omisiones dictados por el egoísmo y por objetivos e intereses
particulares».
Este entramado de leyes, costumbres,
instituciones y normas forma parte de nuestra cultura, que nos presenta un
problema terrible, ante el que hay que lamentarse, pero sin solución posible,
luego tenemos que convivir con él. Este es nuestro pecado cultural: estamos
obligados a mantener una postura estética, pero no ética. La tradición de la
Iglesia es más rotunda: si no alimentas al que muere de hambre, lo matas.
Es necesario, por tanto, evangelizar la cultura para
humanizarla, «redescubrir aquellos valores inscritos en el corazón de cada
persona y que desde siempre han inspirado su acción: el sentimiento de
compasión y de humanidad hacia los demás, el deber de la solidaridad y el
compromiso por la justicia, han de volver a ser la base de toda actividad,
incluidas las que lleva a cabo la Comunidad internacional» (Benedicto XVI)
■
Comparte y difunde esta información■
EDITORIAL
Publicado en NOTICIAS
OBRERAS:
Núm. 1530 [01-12-11 / 31-12-11] pág. 5
Noticias
Obreras diciembre:
“Los ajustes amenazan a los temporeros inmigrantes”
“Los ajustes amenazan a los temporeros inmigrantes”
Comparte y difunde esta información
● Números anteriores de Noticias Obreras:
● Números del Periódico ¡TÚ!: