JORNADA MUNDIAL Y COLECTA POR
LA EVANGELIZACIÓN DE LOS PUEBLOS
Santos Servando y Germán, mártires,
Patronos de Cádiz.
San Juan de Capistrano, religioso presbítero.
23
de octubre de 2022.
La liturgia de hoy nos ofrece elementos que nos orientan hacia
la meditación en la vida eterna y el fin de los tiempos. En la oración colecta pedimos conseguir las
promesas del Señor, amando sus preceptos.
Así lo expresa también la 2ª lect. con estas palabras de san Pablo: «He
luchado el noble combate […]. Me está
reservada la corona de la justicia». Y
la celebración de la eucaristía es ya el comienzo y el anticipo de la vida
eterna (cf. orac. Después de la comunión).
Pero, siendo esto así, nadie puede presumir de tenerla segura, ya que es
un don de Dios que debemos pedir con humildad, puesto que solo Dios es santo y
nosotros somos unos pobres pecadores.
Olvidarlo nos llevaría a la soberbia espiritual de despreciar a los
demás, actitud denunciada por Jesús en el Ev. de hoy: el publicano bajó a su
casa justificado; el fariseo no.
- Sirácida (Eclesiástico)
35,12-14.16-18: Los gritos del pobre
atraviesan las nubes.
- Salmo 33: R/. Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha.
- 2ª Timoteo 4,6-8.16-18: Ahora me aguarda la corona merecida.
Del Evangelio de san
Lucas 18,9-14.
“El publicano bajó a su casa justificado, y el fariseo no”.
Dijo Jesús esta parábola a algunos que,
teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los
demás: -“Dos hombres subieron al templo a orar. Uno era fariseo; el otro, un publicano. El fariseo, erguido, oraba así en su interior:
‘¡Oh Dios!, te doy gracias, porque no soy como los demás: ladrones, injustos,
adúlteros; ni como ese publicano’. El
publicano, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo
se golpeaba el pecho, diciendo: ‘¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador’. Os digo que éste bajó a su casa justificado,
y aquél no”.
COMENTARIO
Estos dos hombres-mujeres son el prototipo de dos
actitudes ante Dios: La de los satisfechos de sí mismos; los que se creen
justos, impecables, distintos de los demás; y la de los sinceros, humildes,
pobres pecadores que reconocen sus debilidades e indigencias ante Dios. También nos manifiesta el Evangelio la
actitud de Dios frente a estos dos tipos de hombres-mujeres: acogida y perdón
para uno y repulsa para el otro. Al
templo va el fariseo y el publicano; el justo y el pecador; el rico y el pobre;
el consciente y responsable de su fe y el que va solamente para cumplir. Pero mientras uno sale igual o peor que lo que
entró, el otro sale perdonado, justificado y salvado. Tu actitud. ¿A cuál se asemeja
más: al fariseo o al publicano?.
ORACIÓN
Dame Señor un corazón sencillo, humilde y
generoso para verme como soy, pecador; y reconocer que Tú eres compasivo. Te pido Señor, que nunca desprecie a los
demás, que me vea libre de la arrogancia y la soberbia de creerme mejor que
otros. Señor que siempre los pecadores
nos sintamos acogidos por Ti, acogidos también en la Iglesia para que nadie
piense que a la Iglesia vamos solo los "buenos". Oh Dios, ten compasión de este pecador y
concédeme la gracia de confiar siempre en tu misericordia. Oh Dios, ten compasión de este pecador.
San Antonio María
Claret, obispo,
fundador de los misioneros claretianos.
24 de octubre de 2022.
Del Evangelio de san Lucas 13,10-17.
“A ésta,
que es hija de Abrahán, ¿no había que sanarla en sábado?”.
Un sábado, en una sinagoga había una mujer que
desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba
encorvada, sin poderse enderezar. Al
verla, Jesús la llamó y le dijo: -“Mujer, quedas libre de tu enfermedad”. El jefe de la sinagoga, indignado porque
Jesús había curado en sábado dijo a la gente: -“Seis días tenéis para trabajar:
venid esos días a que os curen, y no los sábados”. Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo: -“Hipócritas:
cualquiera de vosotros, ¿no desata del pesebre al buey o al burro, y lo llevaba
a abrevar, aunque sea sábado?. Y a ésta,
que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no había
que soltarla en sábado?”. A estas
palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se alegraba.
COMENTARIO
Una obra de caridad y misericordia como la que
hace Jesús con la pobre mujer enferma y encorvada desde hace dieciocho años,
más que constituir una trasgresión del sábado, viene a dar perfecto
cumplimiento al sentido y finalidad del mismo: la gloria y el culto a Dios
mediante la liberación del hombre de toda esclavitud. La observancia del sábado o de cualquier ley
ha de celebrar ese amor de Dios que quiere el bien del hombre-mujer. No olvidemos que las leyes deben estar al
servicio de las personas y nada hay más “sagrado” que la persona.
ORACIÓN
Señor, admiro como liberas de la enfermedad y de
la esclavitud de la ley; admiro que no dependes del juicio de los demás sino de
tu propia conciencia, de la voluntad del Padre.
Haz que yo señor sea capaz de vivir según mis convicciones, de vivir
escogiendo lo que me hace ser más persona. Que sepa también liberar a los demás de
sufrimientos, de prejuicios, de egoísmos.
Que todos nos
veamos liberados por Ti, Cristo Jesús, de nuestros pecados.
Martes de la 30ª Semana T. Ordinario.
Santos Crisanto y
Daría, mártires.
San Gaudencio de Brescia, obispo.
25
de octubre de 2022.
Del Evangelio de san
Lucas 13,18-21.
“Crece el grano y se hace
un arbusto”.
Jesús
decía: -“¿A qué se parece el reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Se parece a un grano de mostaza que un hombre
toma y siembra en un huerto; crece, se hace un arbusto y los pájaros anidan en
sus ramas”. Y añadió: -“¿A qué compararé
el Reino de Dios?. Se parece a la
levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina, hasta que todo
fermenta.
COMENTARIO
Las
dos parábolas contrastan los comienzos insignificantes y el gran desarrollo
final se acentúa en la primera el crecimiento en extensión y en la segunda la
profundidad. En uno y otro caso, gracias
a la fuerza intrínseca. Así sucederá con
el reino la fuerza intrínseca del mismo acabará transformando el mundo entero. Una fuerza que sólo es visible por la fe. En las dos parábolas se ve el éxito final
garantizado por la propia fuerza interna.
Que este evangelio ayude a vivir con mayor confianza en Dios que nos
garantiza un final feliz.
ORACIÓN
Vive
feliz, vive en paz, te lo suplico; piensa que éstas en las manos de Dios
fuertemente cogido para que tu vida llegue a feliz éxito, confía en Dios que te
quiere. El transformará tus esfuerzos en
triunfo, tus tinieblas en luz, tus miedos en paz, tus sufrimientos en vida
nueva. El hará que crezca en ti todo lo
que hay de bondad, de comprensión, de fraternidad, de fe, Él hará que crezca en
ti la semilla de vida nueva que recibiste en el bautismo. Vive feliz, vive en paz, te lo
suplico; piensa que éstas en las manos de Dios.
Santos Luciano y
Marciano, mártires.
26 de
octubre de 2022.
Del Evangelio de san
Lucas 13,22-30.
“Vendrán de oriente y occidente, y se sentarán a la mesa
en el Reino de Dios”.
Jesús les dijo: -"Esforzaos en entrar por la
puerta estrecha. Os digo que muchos
intentarán entrar y no podrán. Diréis: ‘Señor,
ábrenos’; y él os replicará: ‘No sé quiénes sois’. Entonces comenzaréis a decir: ‘Hemos comido y
bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas’. Pero él os replicará: ‘No sé quiénes sois. Alejaos de mí, malvados’. Entonces será el llanto y el rechinar de
dientes. Mirad: hay últimos que serán
primeros y primeros que serán últimos".
COMENTARIO
Se oye decir que Dios es bueno y no puede
castigar; que es Padre y no puede condenar. Y es verdad. Se tiene razón al afirmar eso. Dios es bueno y no castiga. Dios no condena. Somos nosotros quienes nos cerramos la puerta.
Somos nosotros, quienes nos salvamos o
nos perdemos. Dios ofrece un camino y
nosotros lo aceptamos o lo rechazamos y Dios respeta nuestra decisión. Jesús habla de puerta estrecha e incluso que
puede cerrarse. Es una llamada a nuestra
responsabilidad.
ORACIÓN
Señor, no dejes que muramos en nuestras cegueras.
Ábrenos la puerta de la vida, y que
nuestra esperanza alimentada por tu Espíritu nos conceda participar del gozo
eterno. Danos el valor de esforzarnos
por entrar en el Reino para que un día no tengamos que lamentarnos de esta
oportunidad desaprovechada. Señor ayúdanos a emprender de nuevo el camino que
lleva a la Pascua, a la Resurrección.
Jueves de la 30ª Semana T. Ordinario.
San Evaristo, papa. San
Oterano, monje.
27
de octubre de 2022.
Del Evangelio de san
Lucas 13,31-35.
“No cabe que un profeta muera fuera de
Jerusalén”.
Se acercaron unos fariseos a decirle: -“Márchate
de aquí, porque Herodes quiere matarte".
Él contestó: -"Id a decirle a ese zorro: ‘Hoy y mañana seguiré
curando y echando demonios; pasado mañana llego a mi término’. ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los
profetas y apedreas a los que se te envían!.
¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la clueca reúne a sus
pollitos baja las alas! Pero no habéis
querido”.
COMENTARIO
Jesús, ante el aviso que le hacen sobre las
intenciones de Herodes de matarle, contesta que no teme a Herodes ni sus
amenazas porque confía plenamente en el Padre y es preciso que siga su camino
hasta que se cumpla plenamente la voluntad del Padre. En Jerusalén quedará sellado su destino. Allí su misión será coronada en el calvario. Pero hasta entonces ningún poder humano podrá
cambiar el rumbo de su caminar. Un
camino y un final que acepta voluntariamente.
ORACIÓN
Señor que nunca me vuelva atrás en el compromiso
de amor a mis hermanos, en el empeño de hacerles felices, aunque me
crucifiquen. Que mirando el ejemplo de
Jesús sepa confiar plenamente en Ti Padre y caminar sin sobresaltos en el
cumplimiento de tu voluntad. También
quiero darte las gracias Señor, por tantas veces que me cobijas, que me pones a
la sombra de tus alas, que me recoges en tu regazo. Señor que nunca me vuelva atrás en el
compromiso de amor a mis hermanos.
San Simón y San Judas
Tadeo, apóstoles
Viernes de la 30ª Semana T. Ordinario.
28 de
octubre de 2022.
Fiesta de san Simón y san Judas, apóstoles, el primero
apellidado Cananeo o Zelotas, y el segundo, hijo de Santiago, llamado también
Tadeo, el cual, en la última Cena preguntó al Señor acerca de su manifestación,
recibiendo esta respuesta: «El que me ame, observará mi palabra, y el Padre mío
le amará, y vendremos a él y haremos nuestra mansión en él» (elog. del
Martirologio Romano).
Del Evangelio de san
Lucas 6,12-19.
“Escogió a doce de entre
ellos y los nombró apóstoles”.
Subió Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche
orando a Dios. Cuando se hizo de día,
llamó a sus discípulos, escogió a doce de ellos y los nombró apóstoles: Simón,
al que se puso de nombre Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe,
Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago Alfeo, Simón, apodado el Celotes, Judas el de
Santiago y Judas Iscariote, que fue el traidor.
La gente venía a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los
atormentados por espíritus inmundos quedaban curados, y la gente trataba de tocarlo,
porque salía de él una fuerza que los curaba a todos.
COMENTARIO
Jesús es el verdadero pastor, luz, guía y maestro
de la humanidad y de la comunidad de sus seguidores. Él es el “apóstol”, el auténtico “enviado de
Dios. Y en Él se basa nuestra fe cristiana
y el edificio de la Iglesia. Pero ha
sido Él mismo quien ha querido que el grupo de los Doce fuera el fundamento
visible de la comunidad, colaboradores suyos, evangelizadores. Que fueran pastores, guías, maestros: por eso
quiso que convivieran con Él antes de enviarlos a su misión. Simón y Judas fueron llamados por Jesús, le
siguieron, estuvieron con Él y luego dieron valiente testimonio, de su fe. La tradición dice que murieron mártires en
Persia.
ORACIÓN
Señor enséñanos a ser como los apóstoles,
testigos de la fe, anunciadores de buenas noticias sirviendo a todos, siendo
ricos en simpatía y en bondad, con nuestras palabras y obras. Enséñanos a compartir con los demás y a vivir
en comunidad; que en tu nombre sepamos sanar a los enfermos y atormentados por
los espíritus; que en tu nombre llevemos a todos la fuerza de la salvación. Padre; enséñanos a comunicar quién es Jesús: El Señor que vive y reina por los siglos de los
siglos.
Sábado de la 30ª Semana T. Ordinario.
San Feliciano,
mártir de Cartago.
29 de octubre de 2022.
Del Evangelio de san
Lucas 14,1.7-11.
“Todo el que se enaltece será humillado; y el que se humilla será enaltecido”.
Dijo Jesús: -"Cuando te
conviden a una boda, no te sientes en puesto principal, no sea que hayan
convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al
otro y te dirá: -‘Cédele el puesto a éste.’ Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último
puesto. Al revés, cuando te conviden,
vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó,
te diga: -‘Amigo, sube más arriba’. Entonces quedarás muy bien ante todos los
comensales. Porque todo el que se
enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido".
COMENTARIO
El humilde es capaz de comprender y
compartir los problemas del prójimo y por eso tiene una actitud servicial para
todos; mientras que el soberbio se despreocupa de todos y solamente le interesa
aquello que le favorezca a él, aunque perjudique a otros. Pero Dios sabe situar a cada uno en el puesto
que le corresponde, tal como nos lo dice el Señor en el Evangelio de hoy. Por eso se realizará lo que Jesús dice: “El que
se humilla será ensalzado y el que se ensalza será humillado”.
ORACIÓN
Abaja mi orgullo Señor, quita mis
soberbias, enséñame a vivir con humildad, con sencillez, mirando siempre las
necesidades y el bienestar del prójimo. Tú
que colocas a cada uno en su puesto, abaja del trono a los soberbios y enaltece
a los humildes. Tú que te revelas a los
sencillos y humildes concédeme la sabiduría de los sencillos. Tú que ciegas a los arrogantes, no permites
que “los poderosos” dominen y esclavicen a los más pobres. Abaja mi
orgullo Señor, quita mis soberbias, enséñame a vivir con humildad.