[hoac.gif]










UNA MIRADA CRISTIANA DEL TRABAJO HUMANO Y EL BIEN COMÚN
¡ACOGE, ABRAZA, CUIDA, ACOMPAÑA...!
LA VIDA DEL MUNDO OBRERO Y DE LOS POBRES,
CON MISERICORDIA Y COMPASIÓN.


¡Bienvenido/bienvenida! al "blog" de la HOAC diocesana de Cádiz y Ceuta.


jueves, 21 de enero de 2021

ORAR EN EL MUNDO OBRERO «3er. DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO» (24 DE ENERO DE 2021)
CICLO “B”


3er Domingo TO (24 enero 2021)

21 ENERO 2021 | POR 

Queridas hermanas y
queridos hermanos:

A la llamada de Jesús
respondemos personalmente,
pero también comunitariamente,
generando redes de fraternidad,
de solidaridad, de desarrollo integral.

Nuestra respuesta requiere abandonar
caminos individualistas para integrarnos
en la comunidad de los hombres y mujeres
que siguen a Jesucristo.

A la llamada de Jesús hay respuestas
que solo podemos dar en comunión.

Buena semana y ¡a seguir
cuidándose para cuidar!

Fernando Carlos Díaz Abajo
Consiliario General HOAC, y

Mª Ángeles Bayo Valderrama
Responsable de Organización
y Vida comunitaria.



San Marcos 1,14-20.-
«Está cerca el Reino de Dios».

Accede a más oraciones aquí.
https://www.hoac.es/que-hacemos/espiritualidad/orar-desde-el-mundo-obrero/

También en Issuu
https://issuu.com/hoac/docs

https://www.hoac.es/2021/01/21/3er-domingo-to-24-enero-2021/ 

https://www.hoac.es/wp-content/uploads/2021/01/3er-Domingo-TO.pdf 

https://issuu.com/hoac/docs/3er_domingo_to_b8c3d50dc2504f 

Compártelo en redes y entre tus contactos:


«ORAR CON LA IGLESIA»

3ª Semana del Tiempo Ordinario (Ciclo ‘B’)
Del 24 al 30 de enero de 2021.


Domingo 3º del Tiempo Ordinario
San Francisco de Sales,
obispo y doctor de la Iglesia.
Patrono de los periodistas
24 de enero de 2021.

 

 

La conversión y la fe en el Evangelio es el centro de la liturgia de la Palabra de este domingo.  Así, la 1 lect. nos narra que los ninivitas se convirtieron de su mala vida y creyeron en Dios.  Y en el Ev., Jesús nos llama a la conversión y a creer en la Buena Noticia porque está cerca el reino de Dios y la apariencia de este mundo se termina (cf. 2 lect.).  Y como modelos de conversión se nos presenta a Simón, Andrés, Santiago y Juan, que dejaron lo que era su seguridad —sus barcas, sus redes— y se arriesgaron a seguir a Cristo.  Qué Él nos instruya en sus sendas (sal. resp.).

 

Del Evangelio de san Marcos 1,14-20.

“Convertíos y creed en el Evangelio”.

Jesús marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios.  Decía: -"Se ha cumplido el plazo, está cerca el reino de Dios: Convertíos y creed en el Evangelio".  Pasando junto al lago de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, que eran pescadores y estaban echando el copo en el lago.  Jesús les dijo: -"Venid conmigo y os haré pescadores de hombres".  Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.

COMENTARIO

El creer, el aceptar, la Buena Noticia, que es el Evangelio, exige conversión, es decir, un giro total en la vida, un cambio en el modo de proceder, una vuelta hacia Dios, tal como Jesús nos lo va revelando.  La conversión supone reconocer nuestro error en la conducta; nueva actitud de vida, nueva orientación hacia Dios.  ¿Qué soy capaz de hacer yo para acoger la invitación que me hace Jesús al decir: "Convertíos porque el Reino de Dios está cerca"?

ORACIÓN

Hoy te pido que me conviertas Señor, para que no me sienta superior a nadie, ni crea que ya lo sé todo; conviérteme para que viva con intensidad e ilusión la vida de fe.  Conviérteme para que no caiga en la tentación de vivir sin Ti, de olvidarte, de no incluirte en mi día...  Conviérteme del estrés, las prisas y el activismo, que me lleva a vivir sin contemplar, sin rezar, sin descansar en Ti; conviérteme a la Vida en abundancia que Tú me ofreces.  Hoy te pido Señor, que me conviertas. 


Conversión de San Pablo
Lunes 3ª Semana T. Ordinario
25 de enero de 2021.

 

Fiesta de la Conversión de san Pablo, apóstol.  Viajando hacia Damasco, en la actual Siria, cuando aún maquinaba amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, el mismo Jesús glorioso se le reveló en el camino y lo eligió para que, lleno del Espíritu Santo, anunciase el Evangelio de la salvación a los gentiles.  Sufrió muchas dificultades a causa del nombre de Cristo (elog. del Martirologio Romano).

 

 

Del Evangelio de san Marcos 16,15-18.

“Id al mundo entero y proclamad el Evangelio”

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once, y les dijo: -“Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación”.  El que crea y se bautice, se salvará; el que se resista a creer será condenado.  A los que crean, les acompañarán estos signos: Echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno mortal, no les hará daño.  Impondrán las manos a los enfermos y quedarán sanos.

COMENTARIO

La fiesta de hoy nos invita a "convertirnos" también nosotros en nuestros caminos de seguimiento de Jesús.  Por eso hacemos nuestra la súplica que nos propone a oración de la Misa: "Concédenos caminar hacia Ti, siguiendo su ejemplo, y ser ante el mundo testigos de la verdad".  Y también: Que la Eucaristía de hoy "nos encienda en el fuego del amor que abrasaba el corazón de san Pablo y le impulsaba al servicio de todas las Iglesias".  No olvidemos hoy de pedir en nuestra oración por la unidad de los cristianos.  Todos convertidos a Cristo, que es el Salvador de todos, y por tanto, unidos entre nosotros.

ORACIÓN

Conviérteme para que vuelva cada mañana a la alegría, a la ilusión, a la esperanza para volver al perdón, a las razones que tengo para el amor.  Conviérteme para alejar el mal de nuestras vidas para vivir desde lo positivo y saber ver el bien por encima del mal.  Conviérteme para que confíe más en la fuerza de Dios que hará que el bien tenga la última palabra.  En este día de la conversión de san Pablo te pido también Señor por la unidad de todos los que nos decimos cristianos.  Ayúdanos.  Conviérteme para que vuelva cada mañana a la alegría, a la ilusión, a la esperanza al perdón, a las razones que tengo para el amor. 


Martes 3ª Semana T. Ordinario
Santos Timoteo y Tito, obispos y
discípulos del apóstol san Pablo

26
de enero de 2021.

 

Del Evangelio de san Marcos 3,31-35.

“El que haga la voluntad de Dios, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre”

Llegaron la madre y los hermanos de Jesús y desde fuera lo mandaron llamar.  La gente que tenía sentada alrededor le dijo: -"Mira, tu madre y tus hermanos están fuera y te buscan".  Les contestó: -"¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?".  Y, paseando la mirada por el corro, dijo: -"Éstos son mi madre y mis hermanos.  El que cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre". 

COMENTARIO

La nueva familia que instaura Jesús tiene su fundamento en la voluntad del Padre.  María, antes que su maternidad física, tuvo este otro parentesco que aquí anuncia Cristo, el de la fe.  Como decían los Santos Padres, ella acogió antes al Hijo de Dios en su mente por medio de la fe que en su seno por su maternidad.  Por eso es María para nosotros buena maestra, porque fue la mejor discípula en la escuela de Jesús.  Y nos señala el camino de la vida cristiana: Escuchar la Palabra, meditarla en el corazón y llevarla a la práctica.

ORACIÓN

María, Madre de todas nuestras esperas, tú que sentiste encarnarse en tu seno la Esperanza de tu pueblo, la Salvación de Dios, ayúdanos a cumplir la voluntad del Padre.  Madre de todas nuestras esperanzas, tú que acogiste la fuerza del Espíritu para dar carne a las promesas de Dios, concédenos encarnar el Amor, para formar parte de la familia de Dios.  Amén. 


Miércoles 3ª Semana T. Ordinario
27
de enero de 2021.

 

Del Evangelio de san Marcos 4,1-20.

“Salió el sembrador a sembrar”

Jesús se puso a enseñar.  –“Escuchad: Salió el sembrador a sembrar; al sembrar, algo cayó al borde del camino, vinieron los pájaros y se lo comieron.  Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra; como la tierra no era profunda, brotó enseguida; pero en cuanto salió el sol, se abrasó y, por falta de raíz, se secó.  Otro poco cayó entre zarzas; las zarzas crecieron, lo ahogaron y no dio grano.  El resto cayó en tierra buena; nació, creció y dio grano; y la cosecha fue del treinta o del sesenta o del ciento por uno.

COMENTARIO

La semilla en todos los casos es la misma pero las circunstancias de la tierra, del camino, de los pájaros, son lo que hacen que la semilla fructifique o no.  Mira a ver que tierra hay en tu corazón; que disposición hay en tu interior para acoger la palabra; que fidelidad, que constancia tienes en medio de las circunstancias de la vida.  Haz que la fuerza de la palabra de Dios de en ti su fruto.

ORACIÓN

Hoy en mi oración te escucho a ti Señor que me dices: Si tienes las manos abiertas para dar, si sufres al impertinente, si olvidas los agravios, si te alegras de la felicidad ajena, si aplaudes los éxitos de los demás, si tienes oídos para el Evangelio acogerás la buena semilla de la palabra de Dios en tu corazón.  Si das tu tiempo a los demás si llevas paz a los hombres, si sabes vivir con paciencia, acogerás la buena semilla de la palabra de Dios en tu corazón.  Si rezas por quien te hizo mal si compartes con los necesitados si cuentas con la cruz de Cristo, acogerás la buena semilla de la palabra de Dios en tu corazón. 


Jueves 3ª Semana T. Ordinario
Santo Tomás de Aquino, presbítero
y doctor de la Iglesia. Filósofo, teólogo.
28 de enero de 2021.

 

Del Evangelio de san Marcos 4,21-25.

El candil se trae para ponerlo en el candelero.

La medida que uséis la usarán con vosotros”

Dijo Jesús a la muchedumbre: -"¿Se trae el candil para meterlo debajo del celemín o debajo de la cama, o para ponerlo en el candelero?  Si se esconde algo, es para que se descubra; si algo se hace a ocultas, es para que salga a la luz.  El que tenga oídos para oír, que oiga".  Les dijo también: -"Atención a lo que estáis oyendo: la medida que uséis la usarán con vosotros, y con creces.  Porque al que tiene se le dará, y al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene".

COMENTARIO

El Evangelio se nos transmite para que lo escuchemos, para que nos comprometamos con él y para que lo ofrezcamos como luz.  No es posible ocultarlo o esconderlo.  Una vez recibido y acogido es como la luz del candil o de la lámpara que nos quemará las manos si tratamos de ocultarla.  El mensaje de Jesucristo se ofrece para que ilumine toda nuestra vida y vean nuestras buenas obras, sin que para ello tengamos que ir tocando la campana por las calles.

ORACIÓN

Abre mis oídos Señor para que reciba la palabra del Evangelio; abre mi corazón para que se haga vida en mí la buena noticia de tu amor.  Que hoy encarne la gracia de tu presencia.  Que mi vida iluminada por el Evangelio alumbre a quienes me rodean.  Que mi vida no quede indiferente ante el anuncio de la salvación.  Dios mío, que puedas disponer de mí con todo lo que soy, con todo lo que tengo.  Alabado sea Señor por tu palabra que ilumina nuestras vidas alabado seas por tu Evangelio. 


Viernes 3ª Semana T. Ordinario
29
de enero de 2021.

Del Evangelio de san Marcos 4,26-34.

“Un hombre echa semilla y duerme, y la semilla va creciendo

sin que él sepa cómo”

Dijo Jesús: -“El reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra.  La semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo.  La tierra produce la cosecha ella sola: Primero los tallos, luego la espiga, después el grano”.  Dijo también: -“El reino de Dios se parece a un grano de mostaza: Al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después brota, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros pueden cobijarse y anidar en ellas”.

COMENTARIO

El Reino de Dios, su Palabra, tiene dentro una fuerza misteriosa, que a pesar de los obstáculos logra germinar y dar fruto.  Cuando en nuestra vida hay una fuerza interior (el amor, la ilusión, el interés), la eficacia del trabajo crece notablemente.  Pero cuando esa fuerza interior es el amor que Dios nos tiene, o su Espíritu, o la gracia salvadora de Cristo Resucitado, entonces el Reino germina y crece poderosamente.  El Reino crece desde dentro, por la energía del Espíritu.  El protagonista es Dios.  Nosotros lo que debemos hacer es colaborar desde nuestra libertad.

ORACIÓN

Dios de bondad: Abre mis oídos para que yo perciba tu palabra, y germine en mí su fuerza transformadora.  Por tu Espíritu, hazme capaz de orientar mi vida según la fuerza imparable de tu amor, de tu Reino.  Que tus palabras sean palabras creadoras de nuevos horizontes, de una fuerza interior que no deje de crecer cada día hasta que germine en vida plena de hijo de Dios.  Gracias Señor por la fuerza de tu Espíritu, de tu amor, de tu Reino.  Amén. 


Sábado 3ª Semana T. Ordinario
30 de enero de 2021.



Del Evangelio de san Marcos 4,35-41.

“¿Quién es este?  ¡Hasta el viento y el mar lo obedecen!”

Un día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos: -"Vamos a la otra orilla".  Dejando a la gente, se lo llevaron en barca.  Se levantó un fuerte huracán, y las olas rompían contra la barca hasta casi llenarla de agua.  Él estaba a popa, dormido sobre un almohadón.  Lo despertaron, diciéndole: -"Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?".  Se puso en pie, increpó al viento y dijo al lago: -"¡Silencio, cállate!".  El viento cesó y vino una gran calma.  Él les dijo: -"¿Por qué sois tan cobardes?  ¿Aún no tenéis fe?".  Se quedaron espantados y se decían unos a otros: -"¿Pero quién es éste?  ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!".

COMENTARIO

La extensión del Reino no es obra de titanes sino efecto de la fuerza de su propia y elemental sencillez, como la de una semilla.  La comparación del Reino con la pequeñez del grano de mostaza que hace el Señor también nos ofrece una interesante enseñanza.  El Reino no se impone por la fuerza de quien lo proclama ni necesita ayudas humanas para que alcance gran expansión.  La grandeza del mensaje, encerrado en la pequeñez de la palabra humana, es lo que le hace posible ser depositado en la mente y en el corazón de todo hombre.  Al igual que la fe, un grano de mostaza mueve montañas.  ¡Sólo Dios basta!

ORACIÓN

Señor cuídanos en medio de las dificultades, danos calma en medio de la tempestad, ayúdanos a descubrir tu presencia en nuestro caminar, ilumina nuestra historia, tiéndenos una mano cuando nos hundimos.  Señor ayúdame a creer a pesar de que soplan vientos contrarios a la fe, que sepa “esperar en tus promesas” a pesar de las promesas de este mundo, “amar” a pesar de tanto odio, injusticia y violencia.  En la lucha de este día dame tu paz, en el trabajo de esta jornada que no me acobarde; que sepa vivir en la fe de la iglesia porque las olas del mundo no hundirán la nave de la iglesia en la que Tú estás.  Señor ayúdame a creer a pesar de que soplan vientos contrarios a la fe.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes enviar tu comentario a: